Un día en Toledo siempre sabe a poco. La famosa “ciudad de las tres culturas” nos espera muy cerca de la capital de España, a escasos 70 kilómetros de Madrid. Su casco histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es apasionante, entre otros motivos, porque conserva tal cual el trazado que tenía en la Edad Media. El recorrido por sus estrechas calles nos descubrirá un conjunto monumental increíble y muy vivo, tanto por dentro como por fuera.
Empezamos en la plaza de Zocodover donde habíamos quedado con unos guías Free Tour. (Sin precio establecido y una vez terminado el tour, eres libre de ponerle el precio que quieras en función de tu grado de satisfacción)
Fue el centro neurálgico de la ciudad durante la mayor parte de su historia, actuando como plaza mayor de la misma. Una parte de ella fue diseñada por Juan de Herrera en tiempos del reinado de Felipe II. Esta plaza fue también el lugar por donde se corrían los toros y se organizaban las cucañas en las fiestas de la localidad. Se trata, pues, del punto neurálgico de la vida social de la localidad desde tiempos medievales. En Zocodover también se habrían llevado a cabo autos de fe de la Inquisición y ejecuciones públicas de reos.
Empezamos con la historia de Toledo, que se remonta a la Edad de Bronce, continuando ininterrumpidamente hasta la actualidad, pasando por la conquista romana, el dominio musulmán y la capitalidad del reino visigodo y del reino de León. En el siglo XX destacaría en la Guerra Civil Española por el sitio del Alcázar y por convertirse desde 1983 en la capital de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. En 1818, al llegar la peste amarilla a España, se utilizó para almacenar en cuarentena los alimentos destinados a la ciudad y evitar así que entrasen los procedentes de zonas infectadas.
A todos nos llama la atención un agujero en la parte derecha de la fachada.
Son las huellas de los combates en la fachada del Museo de Santa Cruz, en sus ventanas y en su parte derecha, el hueco por la falta de un sillar de piedra desde donde los republicanos intentaron propulsar, mediante mangueras, gasolina para incendiar el Gobierno Militar, no lo consiguieron.
Si hay un lugar por el que todo toledano o visitante habitual ha de pasar en su visita al centro histórico este es el Arco de la Sangre. Situado en plena Plaza de Zocodover es la vía histórica de comunicación de la Plaza principal con los caminos que procedían del sur y este y que confluían en el Puente de Alcántara. Su inquietante nombre se debe a que la capilla que había sobre él era sede de la cofradía de la Preciosa Sangre de Cristo que atendía a los que iban a ser ajusticiados, bien en la propia plaza, bien en el Brasero de la Vega junto a Bisagra.
La estatua, de dos metros de altura, está fundida en bronce. Es obra del escultor Óscar Alvariño Belinchón, nacido en Madrid en 1962, el cual fue el ganador del concurso convocado para tal fin. En una entrevista publicada el 24 de octubre de 2005 en el diario ABC explicaba que había pensado en un Cervantes a la manera de El Greco, con una cabeza pequeña y alargada, es decir, un Cervantes toledano.
El Museo del Ejército tiene su sede en el Alcázar de Toledo. A través de sus fondos y discurso expositivo, se muestra la historia de España y se da a conocer las aportaciones militares al progreso intelectual, social, cultural y científico de España.
El museo del Ejército está instalado en dos edificios: el histórico Alcázar y el de nueva planta, unidos por los restos hallados en las excavaciones arqueológicas realizadas para la ampliación. El Alcázar se ha destinado a la Exposición Permanente. Se estructura en trece salas temáticas, en las que se exponen colecciones específicas, y ocho salas de discurso histórico en las que se presenta un recorrido cronológico por la Historia militar de España.
El Bar Restaurante Ludeña es uno de los tradicionales templos gastronómicos de Toledo, pese a su humilde apariencia y pese a no haber cambiado el aspecto de su fachada y su interior desde hace décadas. Es uno de los mejores sitios de la capital castellano-manchega para degustar aperitivos y cocina de nuestra tierra, pero sobre todo es el lugar en el que se inventó el más genuino plato toledano: (Las Carcamusas). Los dueños de Ludeña lo utilizaron como denominación del rico plato de carne con tomate que acababan de inventar.
En España es un postre tradicional navideño, aunque en Toledo, lugar en el que la primera referencia escrita de este producto se remonta al año 1512, se consume todo el año. También existe otra teoría que apunta que el mazapán proviene de un monasterio en Sicilia. Sea como fuere, el origen remoto del mazapán parece estar en un postre griego elaborado a base de pasta de almendra y miel.
El origen de la palabra es discutido. Algunas fuentes señalan que el nombre del dulce procede de la península ibérica, del latín martius panis (pan de marzo). La Real Academia Española, por su parte, acude al árabe hispánico, el cual a su vez procede del griego (pasamadión), bizcochito, compuesto por masa y pan.
Es un edificio de tres plantas incluyendo el sótano donde se encontraban las cárceles de la Santa Hermandad Vieja de Toledo. Por la puerta principal accedían los cuadrilleros hacia el zaguán donde estaría posiblemente el cuerpo de guardia, desde donde se tenía acceso a una sala situada a la derecha que pudo ser la oficina del Tribunal y donde tenían lugar los cabildos. En el sótano estaban los cuatro calabozos (tres en un principio) de forma rectangular y abovedados, cuyo acceso era a través de una escalera donde había un rastrillo, para evitar que los presos pudiesen escapar. En la primera planta del edificio se encontraba el salón del Tribunal donde se realizaban los juicios a los presos detenidos.
La catedral de Santa María, llamada también Catedral Primada de España, es un templo católico de arquitectura gótica en Toledo, considerado por algunos como el opus magnum de este estilo en España. Su construcción comenzó en 1226 bajo el reinado de Fernando III el Santo y las últimas aportaciones góticas se dieron en siglo XV cuando en 1493 se cerraron las bóvedas de los pies de la nave central, en tiempos de los Reyes Católicos. Está construida con piedra blanca de Olihuelas (en el término de Olías del Rey).
Alguna foto más aquí.
Fuentes consultadas :
Portal oficial del turismo en España
Wikipedia
Toledo CGE
Jose Carlos Canalda
Leyendas de Toledo
no dejas de viajar y nosotros de aprender, un paseo con guía y con imágenes preciosas, cuanta historia tiene las paredes de Toledo. Abrazos
-Ester- Uno o un par de viajes al año, dicen que no hace daño. Vosotros no se si aprenderéis, pero te puedo asegurar que yo si lo hago y mucho, y además me sirve para rememorar en cualquier momento, el viaje que hice hace tiempo.
Abrazos
Tendré que volver a Toledo, pues no he probado las carcamusas.
-Jesús- Ya sabes la próxima vez que vayas no te olvides, lo sirven en muchos sitios, pero el auténtico en el Bar Restaurante Ludeña.
Hola, hace tres años unos queridos amigos me llevaron a conocer Toledo y aunque fue solo un día no olvidare nunca los gratos recuerdos que tengo de ese día, tanto por ver la preciosa ciudad como de la compañía, recuerdo el escaparate de las monjitas haciendo el mazapán:), también entramos en una pastelería a comprarlo y tenían allí una figura a tamaño real de Don Quijote hecho de mazapán, pero la ciudad es preciosa.
Besos.
-Piruja- Me alegro que te haya hecho recordar una agradable visita a Toledo, el Don Quijote de mazapán seguro que alguien se lo fue comiendo y ya no existe. Es posible que aún publique otra entrada más adelante sobre la ciudad, aunque tuvimos mala suerte, por una parte nos llovió en abundancia y por otro lado terminó la penúltima etapa de la vuelta a España, y estaba lleno de policías, vehículos de la vuelta y gente por todos los sitios.
Besos
Eso es belleza, q ue no venga alguien, no se quien, y lo quiera cambiar
un abrazo
-mjesus- No creo que en la actualidad se le permitiera hacer eso, aunque nunca se sabe.
Un abrazo
De lo único que me acuerdo yo es de las ruinas del Alcázar, y de las carcamusas esas, nunca he sabido nada, lo que es la ignorancia, pero ya no me acuerdo de nada mas, hace como cincuentaytantos años que no voy… 🙁
Salud
-Genín- Hace 50 años trabajé en Ocaña y por proximidad fuimos varias veces a visitar Toledo, pero tampoco me acordaba de nada, volvió a ser todo nuevo para mi.
Saludos
Qué ciudad tan bonita y con abolengo y qué ruta por los tramos del pasado. En invierno, esas carcamusas -que no conocía- deben ser mano de santo para combatir el frío castellano.
-Una mirada…- Recordaba perfectamente la perdiz escabechada, pero ahora se prodiga menos que hace 50 años cuando estuve trabajando en Ocaña e íbamos alguna vez a la capital de las pendientes con Bahamontes al frente, y nos la ofrecían en todos los sitios donde entrábamos y eso que un cochazo americano de un compañero con el que íbamos, había que dejarlo a la entrada ya que no cabía por ningún sitio.
Yo tampoco conocía las carcamusas.
Preciosa la ciudad de Toledo. No conozco las carcamusas y tampoco sabía lo del Free Tour. Y qué pasa si al final no les parece bien el dinero que les das? O ya hay una referencia anterior? Abrazos