Un individuo se presenta en unos grandes almacenes para buscar trabajo de vendedor.
– ¿Es usted buen vendedor?
– De primera
– Tendré que hacerle previamente unas pruebas
– Lo que usted considere oportuno.
– De momento lo pondré en la sección de ferretería.
Al tío lo pasan a la sección de ferretería. Al día siguiente todo vendido incluidos los mostradores y la caja registradora.
– Usted se ha pasado un poco ¿eh?
– Si es que cuando me pongo a vender me animo ¿sabe?
– Ahora lo pondré en la sección de sastrería, si me vende este traje queda usted admitido.
El traje tenía delito: La chaqueta era verde, con las mangas amarillas, el pantalón rojo con lunares negros. Al día siguiente el traje vendido.
– ¿Se lo habrá vendido a un familiar?
– No, a un cliente.
– A un cliente y ¿qué dijo el cliente?
– Nada, el cliente no dijo nada, eso si, su perro lazarillo me quería morder.
Un perro con buen gusto y un vendedor capaz de vender papel de lija si se termina el papel higiénico, es como este: Un hombre va a solicitar trabajo en un Centro Comercial moderno de la capital. Lo entrevista el gerente de personal y le pregunta:
—¿Tiene experiencia en ventas?
—Si señor, trabajé vendiendo ropa…
El gerente decide hacerle una prueba así que le dice:
—Ven a trabajar mañana a las 9 A. M. trabajas todo el día y en la tarde te hago una evaluación para saber si quedas contratado o no.
Efectivamente el hombre al otro día trabaja toda la jornada y al final el jefe llega a hacerle la evaluación y pregunta:
—Bien, ¿cuantas ventas hiciste?
—Solo una señor…
—¿Una nada más? —Exclama el gerente —. Muy mal, muy mal… ¿Y de cuanto fue esa venta?
— De US$75.000 a un cliente, señor…
—¿US$75.000, pero que le vendiste?
—Pues vera usted señor, primero le vendí un anzuelo pequeño, después le vendí una caja completa de anzuelos, y enseguida le vendí una nueva caña de pescar. Luego le pregunté que a donde iría a pescar, y me dijo que al Lago Grande. Le informé que que para la época actual el Lago Grande debería estar algo turbulento, así que sería mejor tener un buen bote, y le sugerí uno con doble motor fuera de borda. Me dijo que tal vez su auto no podría con el bote, entonces lo llevé a la sección de autos y le vendí una Explorer 4X4 con el equipo necesario…
El jefe muy impresionado con el nuevo vendedor, le pregunta:
—¿Dices que el tipo vino a comprar un anzuelo y tú le vendiste un bote y una 4X4?
El joven vendedor tímidamente corrige a su jefe diciendo:
—¡No, no señor!… El cliente vino a comprar tampones para su mujer, y yo le dije: «Amigo ya se le jodió el fin de semana… ¿PORQUÉ NO SE VA DE PESCA?»
Un abrazo
Ester Muy bueno, hacía tiempo que no lo leía.
Yo lo titulé «El vendedor del Corte Inglés».
Un abrazo
Todo está escrito y leído, pocas cosas nos quedan inedias, por eso vamos repitiendo, a mi me parece bien es un modo de no olvidarlas. La historieta tiene varias versiones, esta me pareció la mas resumida y la copie tal cual, ni siquiera corregí la moneda. Un abrazo nuevo
Ester En la actualidad hay pocas cosas nuevas en la red. Yo antes recibía muchos correos y la mayoría eran inéditos, con historietas nunca antes oídas, al menos para mi, y con la mayoría con una moraleja.
En la actualidad ya no puedo decir lo mismo, me suenan todas, o al menos las he leído prácticamente el 98% y muchas de ellas las tengo publicadas en el blog.
Abrazos
jajajaja Muy buenos los dos… 🙂
Salud
Genín De vez en cuando vienen bien unas risas.
Saludos
Es que los perros además de inteligentes tienen muy buen gusto.
Calandra El vendedor en este caso hizo trampa, se la vendió a una persona invidente, por ello no pudo decir nada.
Que razón tienes Calandra…
Senior citizen Es que el trajecito «cantaba» demasiado.
– Jubi, ahora alguno lo hubiera comprado de buena gana.
A quien te refieres?
A los componentes de los Carnavales, especialmente los de Cádiz y los de Tenerife.
Jajajajajaja.
Besos.
Crónicas de una Española en Viena Siempre es bueno soltar una carcajada, o cuando menos una sonrisa.
Besos
Si era para Carnavales el traje, me callo… Si no, me parece un abuso… ja, ja. abrazos
Ligia Lo de carnavales se me ha ocurrido a mi por las características del traje pero no creo que ese fuera el contexto adecuado.
Abrazos
Alguna gente necesitaría tener un can estilista como el del chiste.
Una mirada… Sería una buena idea. Es que son muy listos esos perros lazarillos.