Una mujer quiso tatuarse “propiedad de Víctor”; la tatuadora se negó y dividió la opinión en las redes.
Cada vez son más frecuentes los tatuajes con fechas especiales, nombres que se llevan en el corazón y ahora también en la piel e incluso letras de canciones, por sólo mencionar algunos diseños. Sin embargo, a la hora de tatuarse el nombre de alguna pareja comienzan a encenderse las alarmas. Esto es lo que le sucedió a una tatuadora colombiana con una joven que le solicitó el presupuesto de un diseño que, cuando la profesional vio de qué se trataba, se negó a realizarlo.
Todo parecía normal hasta que se le preguntó si tenía idea del diseño, el tamaño y en qué parte del cuerpo quería tatuarse. Allí la joven le envió una imagen con el texto “Propiedad de Víctor” junto con la fecha 30/12/2019 y la frase “Por Siempre”.
“Soy tatuadora y me ha tocado tapar tantos tatuajes así”, “Ojalá que el haberle negado el tatuaje le haga pensarlo mejor”, “Yo estoy en contra de los tatuajes de pareja y menos con uno diciendo ‘propiedad’”.
Crédito : Si queréis leer la noticia completa se encuentra en el enlace, Infobae.
Era una barbaridad. Un beso
-Susana- Si, esa mujer no era consciente de lo que iba a hacer.
Un beso
Hola, había oído algo pero no lo que quería tatuarse, a mi me parece que la tatuadora hizo muy bien en negarse, nadie es propiedad de nadie y esa mujer me parece que no estaba muy bien al pensar de esa manera, tal y como esta todo mejor otro tatuaje, pero seguro que fue a otro y este se lo hizo, en fin, como dice la tatuadora, luego vienen los arrepentimientos.
Besos.
-Piruja- A veces, alguna mujer hace algo que nunca deberían de hacer.
Tatuarse una inscripción que quizás mas adelante se arrepientan de ella, es algo inconcebible.
Besos
Que conste que lo hacen también los hombres y más que las mujeres.
-Senior citizen- El cuerpo muy tatuado no me gusta, mucho menos si son nombres o frases lo que se tatúan.
No me gustan los tauajes, pero allá cada cual con sus decisiones. Si está decidida encontrara otro que le tatue lo que ella quiere. Buenas noches y un abrazo
-Ester- Tampoco me gustan a mi los tatuajes, son posibles problemas.
Sin duda, al hacerse un tatuaje la piel queda más sensible, sufre daños y se vuelve más reactiva. Por lo tanto, no está en las mejores condiciones para afrontar una cirugía. Además, al hacerte el tatuaje, corres el riesgo de sufrir una infección en la zona del dibujo, y si esto ocurre, la cirugía tendrá que posponerse.
Felices sueños, un abrazo.
Me parece genial la negativa de la tatuadora. Una cosa es tatuarse un nombre y otra muy distinta “marcar” a alguien como objeto propiedad de otro.
Un abrazo!
-bisílaba- No entiendo que ella misma se considere un objeto y se lo tatúe en un sitio visible.
Un abrazo
Me pregunto que sienten más allá del simple hecho de tatuarse. Abunda mucho entre la grey futbolística, pero no tanto en cineastas y demás que apenas cuentan. ¿Lo hacen porque se lleva y es el momento de dar muestra de su existencia en el momento actual? ¿Qué están a la moda? Y en el supuesto de que ésta se pase, y es fácil suponerlo, y venga en lucir la piel humana sin ningún borrón encima… deshacerse de lo tatuado…
-Frajayo- Desde mediados de los 90 nuestro país ha vivido una locura por los tatuajes y pasaron de estigmatizarse a integrarse con normalidad en nuestras vidas. El tatuaje no es un invento moderno. De hecho, su origen se remonta a aproximadamente el año 5000 a.C., cuando los japoneses adornaron figurillas de arcilla con marcas similares a las de un tatuaje. Desde entonces, se han descubierto en todos los rincones del mundo, desde las momias elaboradamente adornadas del antiguo Egipto hasta los marineros europeos que los coleccionaban como recuerdo de sus viajes por el Pacífico Sur.
La mujer más tatuada del mundo parece ser que fue Betty Broadbent, artista de circo y tatuadora, también conocida como la «Venus tatuada»
https://es.wikipedia.org/wiki/Betty_Broadbent
Tengo dos hijas que si que les gusta los tatuajes, pero todos los que tienen están relacionados con la naturaleza, estos no suponen ningún problema que luego tengan que borrar con laser. Creo que la tatuadora está en su derecho de decir que no, lo mismo que la que desea tatuarse de ponerse lo que quiera, más tarde puede que «venga el tipo paco con las rebajas»
-emilio- No me gustan las personas tatuadas en exceso, no obstante los admito si estos son muy pocos. Aparte de eso, los expertos de salud sostienen que el níquel y el cromo, que son alérgenos, se desprenden de las agujas del tatuaje.
Saludos
No es muy normal que un tatuador o tatuadora censure la idea de un cliente o clienta; he visto tatuajes vergonzantes que se suponen realizados por profesionales. Esta tatuadora es, pues, rara avis. Ahora, la clienta es una mema de categoría.
-Una mirada…- Aunque los tatuadores admiten todo lo que el cliente les pide, hay sin embargo alguna que no traga con lo que la clienta quiere, en parte no me extraña, al fin y al cabo es tirar piedras contra todas las mujeres.
La idea me echa para atrás, pero cada uno es libre de tatuarse lo que quiera siempre que lo haga voluntariamente. Por otro lado, la tatuadora hizo bien en negarse. Ella sabe por experiencia que a veces la gente se arrepiente más tarde.
-Tawaki- A mi nunca me han gustado, especialmente si son muy llamativos y por supuesto tatuarme yo algo, ni por equivocación, al igual que el pendiente o piercing, en los hombres.
Bravo por la tatuadora, la aplaudo, nadie es propiedad de, aunque no aplauda su oficio, porque a mí, no solo no me gustan los tatuajes… ¡Los detesto! Podrá ser la persona más guapa del mundo, un artista de cine, un cantante o quien sea, pero con tatuajes, se degradan a calidad de criminales, de piratas o gente salvaje, que son los que se los ponían. Es terrible que se haya hecho moda, algo tan horrible, doloroso y perjudicial, para la salud de quienes se los ponen y de los ojos que los miran. Prohibidos los tatuajes en mi entorno. No permito que nadie menor que yo se los ponga y si lo hacen, les dejo de hablar para siempre. Lo he hecho. Cero tolerancia. Y eso edad o mayores, por supuesto que con mayor razón. Pero si alguien tiene un tatuaje porque lo obligaron en la guerra, en algún campo de concentración, bueno, eso lo comprendo, es otra la razón.
Abrazos.
Y de mi edad o mayores* debe decir.
-Sara O. Durán- Yo no llego a esos extremos, pero eso de ver a una persona excesivamente tatuada, me produce una reacción negativa.
Recuerdo un caso en cierta ocasión donde estábamos comiendo tres o cuatro matrimonios y uno de ellos nos había invitado por algún acontecimiento, el camarero que nos servía llevaba un pequeño tatuaje en una de las manos y un piercing, que no llamaba excesivamente la atención. Hizo llamar al maître y le pidió que nos cambiaran de camarero, cosa que hizo de inmediato.
Abrazos