Ocurrió hace unos días, durante la tarde del domingo 10 de septiembre. Después de una de las situaciones más excepcionales vividas en la historia del Control Aéreo español, tres controladores aéreos tienen que pedir el relevo y ser sustituidos, una de ellos con la espalda bloqueada y dolorida por la la tensión extrema que se vivió durante unas horas en el Centro de Control de Barcelona.
No se esperaba mal tiempo ni grandes concentraciones de nubes o cumulonimbos(1), tan peligrosos para la aviación y que tantos quebraderos de cabeza originan en tripulaciones y equipos de control aéreo. Iba a ser un día normal, con mucho tráfico como suele ser habitual en un año en el que España bate, mes tras mes, todos los récords de vuelos controlados. Si acaso, se sabía que había posibilidad de producirse rachas de viento fuerte, pero nada que no ocurriera en tantas otras ocasiones.
La capacidad máxima de la aproximación a Barcelona está establecida en 39 aviones a la hora, cifra de la cual los controladores llevan protestando desde que se estableció, ya que excede la capacidad real del aeropuerto.
Lo que no podían haber previsto es todo lo que ocurrió a continuación.
Seis aviones seguidos con los que el sector de Aproximación no contaba, y para los que no puede activarse el procedimiento de frustradas(2) múltiples, al no considerar seguro volver a “meterlos” en la secuencia de aproximación a la misma pista. Hacía falta un cambio de pista, pero al ser una situación repentina, no había nada coordinado con antelación.
Se intenta regular el flujo de tráfico entrante, de manera tibia al principio y de forma tajante después, aunque demasiado tarde, creándose una situación en la que los controladores tuvieron que poner a “dar vueltas” a los aviones en donde pudieron, habiéndose “llenado” los circuitos de espera publicados.
Se llama al Centro de Control francés de Burdeos para decirle que Barcelona no acepta más aviones (algo absolutamente único en la historia reciente). Burdeos cumple, y pone a hacer esperas en ruta a varios aviones a niveles de crucero a la altura de Perpignan, teniendo que desviarse a otros aeropuertos finalmente.
Y llegó el caos. Al menos 12 aviones se desvían a otros aeropuertos: a Girona, Valencia, Palma, Zaragoza, Perpignan y Reus.
En medio de todo esto, un piloto declara emergencia «MAYDAY»(3) por aviso de fuego eléctrico en cabina, por lo que se le da toda la prioridad, sacando a los aviones que se encuentran en aproximación final para darle paso. Y empiezan los “cortos de combustible”. En un momento dado, los cinco vuelos que estaban en el localizador habían declarado insuficiencia de combustible, lo que es una situación insólita, ya que normalmente se deja entrar primero al que declara estar en esa condición, y en este caso hubo que hacer secuencia con todos ellos.
El AMAN(4) se volvía loco, no sabiendo la pista en servicio ni el orden de secuencia de entrada de los aviones, y teniendo los controladores que ir, uno a uno, asignando horas previstas de aproximación a los aviones, según lo que en cada momento iba ocurriendo.
En resumen, una tarde que algunos controladores presentes consideran como la más extrema de toda su vida profesional, con sobrecarga en todos los sectores y conflictos de tráfico detectados in extremis, en la que tres controladores acabaron en el servicio médico y una multitud de aviones en aeropuertos diferentes a los programados.
Fuente : Controladores Aéreos.org
(1) Los cumulonimbus son un tipo particular de nubes de gran desarrollo vertical generadas por movimientos convectivos (ascensos y descensos en la misma), responsables de la turbulencias en aviones.
(2) Un procedimiento de aproximación frustrada es una maniobra que realiza un piloto cuando una aproximación instrumental no se puede finalizar en un aterrizaje en condiciones seguras por cualquier motivo, teniendo que volver al aire.
(3) La situación en que se utiliza «mayday» es cuando una embarcación, un avión o un vehículo se encuentra en peligro grave e inminente, y requiere ayuda inmediata.
(4) Funcionalidad de ayuda para la gestión de arribadas.
Casi todo me suena a chino, he intentado entenderlo pero no se si es un problemas de espacio, o de protocolo, en cualquier caso no me enteré de nada, o no trascendió o me despisté y no escuche las noticias, Abrazos
Ester Son noticias que raramente trascienden, está extractado de la web de los controladores aéreos y aunque ellos tratan de darle visibilidad, al gobierno no le interesa que se sepa.
Abrazos
Seguro que le achacaron la culpa a Rajoy como de todo lo que pasa en Cataluña hoy en día.
Calandra Acabo de salir a la calle y yo le echo la culpa a Rajoy del frío que hace, 2 grados sobre cero, seguro que es para que gastemos gas-oíl en la calefacción.
Es decir, que quienes eligieron el avión para evitar atascos carreteros se dieron con un canto en los dientes.
Una mirada… En determinadas circunstancias y trayectos cortos se llega antes en coche.
Jubi, juras decir toda la verdad
Esto es un sueño, una pelicula de terror, o es verdad todo tal y como lo dices
un abrazo
Maria Jesus Ruiz Alonso ¿Juras decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad?
Si, juro. Es lo que aparece en la web de los controladores aéreos.
http://www.controladoresaereos.org/2017/09/13/tarde-de-infarto-en-el-espacio-aereo-de-barcelona/
Un abrazo
Perdana, pero lo estaba leyendo, y de verdad, si siembran coliflores, nace perejil
Ademas en Barcelona, que va a montar el 2 de mayo
un abrazo
Menuda tensión, menos mal que los controladores están entrenados, pero así y todo…
Salud
Genín No me extraña que varios controladores se tuvieran que dar de baja, la tensión en el trabajo debía de ser máxima.
Saludos
Perdona, pero lo estaba leyendo, y de verdad, si siembran coliflores, nace perejil
Ademas en Barcelona, que van a montar el 2 de mayo
un abrazo
Maria Jesus Ruiz Alonso La verdad es que se les fueron acumulando todos los problemas existentes en un aeropuerto.
Un abrazo
Entre la saturación de los aeropuertos, el ahorro en combustible y demás cosas, algún día vamos a tener un disgusto muy serio. Luego, con poner velitas ya estamos tranquilos.
Tawaki Cada vez hay más vuelos de bajo coste, y cada vez tratan de que el avión pese menos para gastar menos combustible. Ahora una nueva normativa les obliga a dar todas las órdenes en inglés aunque controladores y pilotos sean españoles, esto traerá algún disgusto, ya que los españoles por lo visto no pronunciamos muy bien el inglés, pese a que todos los controladores conocen el idioma.