Hugh Elliott, embajador del Reino Unido en España, ha comenzado una serie de visitas oficiales por el país en la ciudad de Burgos. Elliott ha compartido en su cuenta de Twitter una historia que le pasó de joven en la ciudad, cuando llegó para hacer el Camino de Santiago en bicicleta.
El embajador británico busca a Lourdes, la burgalesa que protagonizó una anécdota de su juventud.
En 1984, durante un viaje en bicicleta desde Reino Unido hasta Santiago de Compostela, un joven y desconocido Hugh Elliot decidió que, para ahorrar algo de tiempo, iba a coger un tren desde Carcassonne, al sur de Francia, hasta Burgos. Facturó su bicicleta y llegó sano y salvo a la ciudad. Pero la bicicleta se perdió en algún vagón.
Actualización : Y las redes sociales la encontraron, sin embargo no se esperaba este final. Pulsar en la imagen para ver el resultado, recordar activar el sonido.
Fuentes : El País, Europa Press, El Mundo.
Lo curioso de esta historia es que haya tardado tantos años para expresarle su agradecimiento, raro, si…
Salud
-Genín- Dicen que más vale tarde que nunca, pero 35 años es demasiado tiempo.
Saludos
Hola, vi la noticia en tv, la pena es que la señora a la que busca murio a los 35 años de esclerosis múltiple, lo han dicho hoy.
Besos.
-Piruja- En mi caso como casi nunca veo la tele, me entero de las noticias, es este caso de esta curiosidad, por los diarios que leo en el ordenador.
Besos
Hoy he leído la mala noticia, realmente ha tardado en buscarla pero la vida a veces se escribe sola. Abrazos
-Ester- En este caso la curiosa historia no tiene un final feliz, como ha ocurrido en otros casos, pero al menos para nosotros conocemos el inicio y el final de la anécdota.
Abrazos
Lamentable que haya tardado tanto.
-Jesús- En ocasiones las cosas se van dejando y ocurre lo que en esta narración.
La vida no es como esas películas donde los protagonistas, tras muchas vicisitudes, llegan al The End con los sueños cumplidos. Pero esta, la historia real del embajador y la burgalesa, sigue siendo una entrañable historia, pese a la muerte de la mujer.
-Una mirada…- Solamente en los cuentos las historias tienen un final feliz, y tampoco siempre, al igual que ocurre en esta historia.
Sí, ya conocía el asunto y su resolución. Dicen que más vale tarde que nunca, pero el agradecimiento de este señor ha llegado demasiado tarde.
-Senior citizen- Se lo pensó demasiado tarde, quizás esperando tener un puesto prominente en España.