Son tan osados como habilidosos, capaces de arrebatarle a uno el reloj de la muñeca con un simple gesto, en cuestión de pocos segundos… Son los relojeros. Y la víctima no da crédito. Grupos de delincuentes especializados en el robo de relojes de lujo están operando de manera intensiva este verano en Barcelona, sobre todo en el distrito de Ciutat Vella. Anteayer mismo por la mañana, en la calle Serra Xic, dos individuos arrebataron a un turista extranjero un Rolex valorado en unos 15.000 euros.
Pero el robo más espectacular de las últimas semanas es el de un modelo valorado en 200.000 euros. Al menos así lo aseguró en la correspondiente denuncia su legítimo propietario, un visitante de Barcelona de origen japonés. En las últimas semanas, tanto Mossos d’Esquadra como la Guardia Urbana de paisano han realizado detenciones in fraganti, recuperando las piezas robadas. El problema es que la mayor parte de estos robos se llevan a cabo sin violencia. De manera que los jueces se muestran tendentes a dejar en libertad a los sospechosos. La última detención se produjo a la semana pasada.
Hablamos de varias bandas cuyos miembros están muy especializados. No actúan de manera improvisada. Lo habitual es que trabajen por encargo, que busquen modelos muy concretos. Ello les obliga a seguir a la víctima, a buscar el momento oportuno, a encontrar el escenario propicio. Y es que existe un importante mercado negro de relojes robados, particulares dispuestos a hacerse con una de estas piezas para ostentar más que nadie. Los profesionales del mundo de la relojería tratan de entorpecer este mercadeo trapichoso. Desde hace unos años, las principales marcas de relojes de lujo disponen de un sistema por el que se alerta de cada pieza robada. Los ladrones roban por encargo, y el comprador sabe que ante cualquier contratiempo, si lo lleva a reparar a una casa oficial, el dueño del negocio alertará a la policía.
Hasta ahora todos los detenidos son de origen magrebí, algunos de ellos, menores de edad. Acostumbran a actuar de un modo itinerante, de ciudad en ciudad, allá donde se encuentran el dinero y el lujo.
Los llamados relojeros irrumpieron en Barcelona con inusitada fuerza durante el año pasado. El éxito turístico de la capital catalana siempre les atrajo. De hecho, durante el año 2017 fueron desarticulados varios grupos de relojeros. Además, los hoteleros de la ciudad están muy concienciados y acostumbran a aconsejar a sus clientes no callejear demasiado con sus mejores piezas en la muñeca.
Visto en La Vanguardia.
De momento roban en Barcelona pero seguro que se irán expandiendo, las leyes no les asustan. Habría que buscar a los que compran los relojes robados. Abrazo
Ester Espero ser de los que no se lo roben y es que creo que mi «Rolex» que lo compré en el rastro por cinco duros de los de antes, se le nota claramente que solamente anda si le empujas un poco y los relojeros nada más que se lo llevo para que me cambien las pilas, misteriosamente, les pasa a la mayoría, se les cae en la papelera y luego es muy difícil encontrarlo.
Abrazucos.
Hola, vi el vídeo en las noticias y vaya maña que tiene esta gente, yo no tendría valor y menos el bolsillo esta para eso de comprar algo por ese dineral y menos salir a la calle con el:), pero si esta gente lo hace por encargo la culpa es de quien los encarga y compra, por eso la justicia que esta mas bien ciega cada vez mas, debería ir a por ellos también y poner castigos bien duros para que la próxima al menos se lo piensen.
Lo del fondo es granizo?, madre mía te cae uno en la cabeza y te la abre.
Besos.
Piruja En cuanto a llevar algo valioso visible, además de no poder permitírmelo, no lo llevaría.
En cierta ocasión en una playa en Venezuela estaba en el agua, simplemente saltando para evitar que las olas se me llevaran, cuando noto un pequeño tirón y observo que me he quedado sin una Virgen del Carmen que llevaba al cuello, cadena y medalla de oro, al darme la vuelta estoy rodeado de media docena de jóvenes que me estaban mirando, yo agaché la cabeza y me reuní con mis compañeros a comentárselo.
La alianza de casado al año ya me la había quitado, se me agarró en una bisagra de los antiguos tranvías de Zaragoza y casi me dejo el dedo, ahora la tiene mi mujer enlazada junto a la de ella que tampoco la lleva puesta.
Efectivamente lo del fondo es granizo, no es una foto hecha por mi, pero si quieres puedes ir a este enlace de hace 11 años cuando empezaba con el blog, y allí verás una foto mía de otra tormenta.
Besos
Mientras uno entretiene a la víctima en tono amigable, en un momento relajado de la conversación, otro se hace con el reloj. Ha sido visto y no visto y por lo inesperado del tirón, su reacción unos segundos tardía, resulta imposible controlar al ladrón.
Frajayo Son especialistas en el robo de relojes, por ello no es de extrañar que lo hagan con esa facilidad. Al principio cuando todavía no han empezado a robar, practican entre ellos la manera de sacar el reloj, igual da que lo lleven con correa como con pulsera metálica, es tanta la facilidad que adquieren que en ocasiones la persona robada ni se da cuenta de que se lo han quitado.
Hay demasiadas leyes que parece haber sido hechas para proteger a los delincuentes, no entiendo como no se dan cuenta de tanta estupidez y las modifican para que sirvan para realizar su fin, el de proteger al ciudadano y castigar al delincuente para que se lo piense dos veces, antes de delinquir, igual para los corruptos, claro, y que además, el ser político, sea un agravante… 🙁
Salud
Genín En estos casos no se que ocurrirá, pero en los pequeños hurtos de hasta 400 euros, solamente les toman declaración y los sueltan, por lo menos el delito podría ser acumulativo, pero como bien dices parece que protegen al delincuente.
Saludos
Madre mía, hay que tener mil ojos.
Parece increíble la naturalidad y «eficacia» con que lo hacen. Terrible.
¡Caray! Pone los pelos de punta.
No creo que esto tenga fácil solución mientras exista ese mercado negro y gente dispuesta a robar. Ojalá me equivoque…
Un beso, Jubi.
Faerie Glen De momento muy mal pinta este tipo de robos, y lo más gordo es que los hacen por encargo sabiendo de antemano a quien deben de robar, puesto que saben el tipo de reloj que tiene y la venta la tienen asegurada.
Un beso
Pues conmigo no van a hacer negocio, ya que mis relojes son muy normalitos y, encima, estoy perdiendo la costumbre de llevar reloj desde que puedo mirar la hora en el móvil.
Senior citizen Conmigo tampoco pese a que siempre voy con el reloj, ya que si no lo llevo noto que me falta algo, debe de ser deformación profesional ya que en mi trabajo era necesario controlar los tiempos de cualquier incidencia, pero es muy barato y se nota.
Así es España, defendiendo siempre a los delincuentes y fomentando, con la compra de material robado, el mercado negro. Es una de las razones por las que me alegro de no vivir más allí, por mucho que sepa que algún día no me quedará más remedio que volver.
Tawaki Ignoro que ocurrirá en otros países, pero desde luego, la manera de tratar aquí a los delincuentes, creo que no tiene parangón.