Hoy veremos uno de los monumentos más populares de Zaragoza. Ni más ni menos que la Puerta del Carmen. Un lugar que ya no abre ni cierra nada, salvo las puertas de la memoria, ya que su presencia es una invitación a recordar acontecimientos memorables.
Hasta doce puertas tuvieron los diversos muros de Zaragoza, cuya función era el control de los accesos a la ciudad, tanto de personas como de mercancías, y su correspondiente pago de impuestos. La puerta del Carmen es la única que queda en pie…….
La Puerta del Carmen es la única puerta que se conserva de las doce (cuatro romanas y ocho medievales) con las que llegó a contar la muralla defensiva de Zaragoza.
Construída en 1789 por el arquitecto Agustín Sanz e inaugurada en 1792 se levanta sobre la antigua puerta del Carmen, que formaba parte del segundo recinto amurallado de la ciudad.
Su estructura, a modo de arco triunfal romano, responde a modelos neoclásicos madrileños. Apenas cuenta con elementos decorativos externos, salvo el almohadillado de sus sillares y el remate en bolas de la parte superior de la puerta, de las que aún queda alguna.
El arquitecto optó por un diseño de lo más funcional. Se usaron grandes sillares de piedra blanca, y sus tres entradas son adinteladas. Es decir, rectas, olvidándose de arcos que compliquen y encarezcan la construcción.
La puerta central más amplia, para carruajes y animales, y las laterales, para personas a pie. Todo con un sentido muy práctico, y tan solo se permitieron los adornos de cuatro grandes bolas en las esquinas más altas. Si bien, solo han resistido el paso de los siglos dos de ellos.
La puerta tiene estructura de arco triunfal romano con un arco central y dos menores laterales. Sin gran interés arquitectónico, tiene el valor histórico de haber sido testigo de acontecimientos trascendentes para la ciudad. Durante la guerra de los sitios (1808-1809) la puerta sirvió de bastión a la resistencia aragonesa quedando las huellas de los proyectiles todavía visibles en su estructura. También fue la puerta a través de la que entró el ejército en la ciudad en 1838 durante la Primera Guerra Carlista.
Traducción libre de la inscripción de la puerta izquierda.
«A Dios Optimo Máximo, el Ayuntamiento de la muy ilustre ciudad de Zaragoza dedica esta Puerta del Carmen, levantada desde sus cimientos con dinero público, agrandada, decorada y acabada con las riquezas, la generosidad y la munificencia del zaragozano D. Miguel de Losilla, para que una entrada triple quede abierta para los zaragozanos que salgan de viaje a ver al Rey y para los viajeros deseosos de visitar la Augusta ciudad, sus templos y los monumentos de los mártires».
Recuerdo del Bicentenario de Los Sitios de Zaragoza.
En 1808, durante el transcurso de los Sitios de Zaragoza sufrió grandes ataques. Hay que tener en cuenta que por entonces, la Puerta del Carmen no era un ente aislado como la vemos hoy. Era la única abertura en una larga muralla. Así que era el punto por el que los enemigos querían entrar. O sea que frente a ella se libraron duras batallas y las huellas de disparos y pólvora todavía se pueden leer en sus piedras.
Como dato anecdótico, el 23 de febrero de 1997 un autobús colisionó de madrugada con el monumento desencajando varios sillares y poniendo en peligro su estabilidad. La puerta fue convenientemente restaurada y, en la glorieta se añadieron unas piezas protectoras para evitar futuros accidentes.
La puerta del Carmen recibió el título de monumento nacional en la exposición hispano-francesa de 1908 y es Bien de Interés Cultural.
Traducción libre de la inscripción en la puerta de la derecha.
«En el año 1794 después del nacimiento de Cristo, los Optimos Padres de la Patria [óptimos concejales] embellecieron el otrora pinar de Santa Elena, especialmente ilustre por las enseñas vencedoras de los cristianos y por las victorias conseguidas en defensa de la Fe y de la Religión, con esta nueva obra construida para honrar la muy noble ciudad, para beneficiar a todos los ciudadanos y para embellecer el Camino Real, mientras reinaba en España Carlos IV de Borbón, nuevo Constantino, y Luisa, su muy querida esposa»
No acaban aquí los momentos bélicos de la Puerta del Carmen. Treinta años después, es decir en 1838, en la madrugada del 5 de marzo por aquí entraron los carlistas para intentar tomar Zaragoza. Si bien, horas más tarde de la incursión fueron de nuevo expulsados a sangre y fuego. Un acontecimiento que hoy se conmemorara cada año en el calendario local.
Fue entre 1925 y 1927 cuando todas esas casas y muros que envolvían a la puerta se demolieron, por aquel entonces la puerta dejó de ser parte de una muralla y poco a poco perdió su función de lugar de paso y de pago, ya que durante mucho tiempo por atravesarla había que abonar el pertinente peaje. Al fin y al cabo la ciudad estaba creciendo, y aquellos límites quedaban obsoletos.
Al fondo y en la parte superior, el campanario del Monasterio Carmelita de La Encarnación.
La Puerta del Carmen se había convertido ya en un monumento, y eso impidió su demolición. Se mantuvo en el paisaje urbano y el tráfico rodado cada vez mayor y poco a poco la fue cercando.
Así se mantiene hoy en día, como un hito entre el incesante ir y venir de coches, motos y autobuses.
En 1927, tras el derribo de la única casa contigua que quedaba, se inauguró como monumento exento conmemorativo. Su estructura, a modo de arco triunfal romano, responde a modelos neoclásicos madrileños.
Autor/es:Desconocido (null)
Colaboradores:Agustín Sanz (correcciones y mejoras en el diseño); Joaquín Insausti (cantería); Francisco Torrente (carpintería); Pedro Lagera (cerrajería); Pio Cañizar de San Sebastián (texto de las lápidas).
Emplazamiento:En la confluencia del paseo de Pamplona con el paseo de María Agustín, la avenida de César Augusto y la calle de Hernán Cortés.
Periodo:[-1808] Antes de la Guerra de Independencia
Materiales:Piedra blanca (la puerta en si), piedra negra de Calatorao (las dos lápidas), madera (viga maestra), metal (grapas de anclaje).
Cronología:1792-1795
Promotor:El Ayuntamiento de Zaragoza se encargó de promover la primera fase de las obras y los detalles decorativos finales. La segunda fase se debió a la munificencia del ciudadano Miguel de Losilla.
Propietario:Ayuntamiento de Zaragoza.
Créditos : Zaragoza.es, Wikipedia, Enjoy Zaragoza.
Una puerta con historia, es tan importante como podrían serlo los adornos, está muy bien que se cuide y me ha encantado conocer su historia y lo que ha vivido. Un abrazo
-ester- Ya sabes, cuando vengas por Zaragoza y la veas podrás informar a todos tus acompañante de la historia de esta famosa puerta.
Un abrazo
Encuentro muy bien conservar una parte de estas estructuras, dan una idea clara de cómo se hacían las cosas tiempo atrás.
Feliz jueves.
-Magda- Es bueno recordar acontecimientos que ocurrieron en el pasado, para tratar de no cometer esos mismos errores.
Feliz jueves
Está muy bien, pero podrían arreglarla un poco. Un beso
-Susana- En este caso no estoy de acuerdo contigo.
¿Hay que tapar las cicatrices que dejaron las balas y cañones de Napoleón tratando de invadir España? Estas cicatrices de guerra, nos recuerdan a los zaragozanos lo que nuestros antepasados vivieron para salvar a Zaragoza de la invasión napoleónica y para los foráneos, seguro que les pica la curiosidad por saber a que se debe esta puerta que se encuentra rodeada de jardines y aparentemente destrozada.
La foto está hecha en invierno, pero en primavera está rodeada de flores de todo tipo que la engalanan.
Un beso
En otros lugares se ha dejado este tipo de huellas, en Barcelona creo que en la iglesia de Sant Felip Neri y me parece que en el techo del Parlamento también se dejaron los agujeros provocados por los tiros de Tejero durante el golpe de estado.
Son una parte de la Historia.
-Magda- Tienes razón en estos casos es bueno dejar las huellas que provocaron que el edificio o monumento se quede en las condiciones que lo malograron.
Además de lo que representa por su valor histórico, tiene gran belleza, que resalta por el contraste moderno del entorno.
Abrazos.
-Sara O. Durán- Es una construcción antigua y lógicamente resalta al estar rodeado de edificios modernos e incluso de un monasterio de edificación moderna.
Abrazos
La pobre puerta del Carmen ha sido testigo y víctima de muchas vicisitudes violentas, tal como nos narras. No conocía nada sobre ella, pero me parece muy bien que ahora sea cuidada y mimada por las instituciones. Se lo merece y nos merecemos admirarla.
Un abrazo, Jubi
-bisílaba- Fue pobre en su tiempo, pero ayudaba al mantenimiento de la ciudad ya que había que pagar una peaje por pasar, luego se envalentonó y ayudó a los ciudadanos de Zaragoza a no dejar pasar al enemigo.
¿Ejército? Si algo había, pero si no hubiera sido por la ayuda prestada por los habitantes de la ciudad que la defendieron con horcas, guadañas, cuchillos, escopetas de caza de una sola carga, seguro que las tropas napoleónicas hubieran vencido.
Un abrazo
Es raro que, de tantas puertas, no se conserve más que esta, pues las de su época son relativamente recientes.
-Senior citizen- Las ocho puertas medievales se llaman o llamaron : Puerta de San Ildefonso, de Sancho, del Portillo, del Duque de la Victoria, Quemada, del Sol, de Carmen y la Puerta de Santa Engracia.
Y si quieres conocer sus historias son estas.
https://www.soydezaragoza.es/las-12-puertas-zaragoza/
Hola Emilio, ya sé que prefieres contestar a los blogs que el control de respuestas. Lo tuve que poner por el latazo que me dan con el segundo apellido mío.
Y no te quiero poner en el compromiso de que lo hagas al comentarte con frecuencia. Pero te leo.
Bien, vengo a invitarte a mi blog a un juego. La primera en contestar ha sido Ester. Pero la solución será en este finde, algo similar a lo que hacemos en el blog de Montse.
No hay compromiso alguno, era para darte la oportunidad.
Un abrazo.
Perdón: «no prefieres» (quería decir).
-Mari Carmen Franconetti- El problema que tengo cuando los comentarios están moderados, es que al día siguiente no recuerdo si he comentado, si lo he tratado de hacer, o si mi comentario ha ido a spam, por ello todo lo que no vea escrito sobre sobre la marcha, no me termina de convencer. Ahora voy a tu blog.
Un abrazo
Me ha gustado conocer su historia y hasta su existencia porque de las veces que he visitado Zaragoza no recuerdo haberla visto ¡voy a tener que ir por allí a darme una vueltecita por esos rincones tan curiosos que nos muestras!
Preciosa puerta y muy buenas las fotos que le has hecho.
Besos.
-Montse- Esta se encuentra en el centro de Zaragoza, paro al ser pequeña, rodeada de grandes edificios y con mucha circulación si vas en coche, quizás no la veas por estar pendiente del tráfico y si vas en bus y no sabes donde se encuentra pasas al lado y no la ves.
Besos