Un profesor está almorzando en el comedor de la Universidad, entonces, un alumno viene con su bandeja y se sienta al lado del profesor.
El profesor, altanero, le dice:
—Un puerco y un pájaro, no se sientan a comer juntos.
A lo que contesta el alumno:
—Pues me voy volando, y se cambia de mesa.
El profesor verde de rabia, decide emplazarlo en el próximo examen, pero el alumno responde con brillantez. Entonces le hace la siguiente pregunta:
—A ver jovencito, usted está caminando por la calle y se encuentra con una bolsa, dentro de ella hay dos sobres. Uno contiene la sabiduría y otro mucho dinero, ¿cuál de los dos se llevaría?.
El alumno responde sin titubear:
—¡¡¡El dinero!!!.
El profesor le dice:
—Yo, en su lugar, me hubiera llevado la sabiduría, ¿no le parece?
—Cada uno toma lo que no tiene, responde el alumno.
El profesor, ya histérico, escribe en la hoja del examen:
—¡¡Idiota!!!. Y se la devuelve.
El alumno toma la hoja y se sienta. Al cabo de unos minutos se dirige al profesor y le dice:
—Profesor, me ha firmado la hoja pero no me puso la calificación…
jajaja Le terminaría dando un ataque de nervios al profe… 🙂
Salud
Genín He conocido a profesores muy buenos y dialogantes, también he conocido los que nunca daban su brazo a torcer.
Saludos
Manudo alumno respondón, pero está claro que mas inteligente que el profesor.
Calandra Más rápido contestando que los protagonistas de pasapalabra.
Hay alumnos que nunca se rinden.imagino que sacará buenas notas. Un abrazo
Ester Tal como responde tiene pintas de ser una persona con muchos conocimientos y fáciles respuestas.
Un abrazo
Qué buen ejemplo ese alumno. A veces uno no tiene de manera tan pronta, esas respuestas tan acertadas. Touché.
Un beso.
Nélida Evidentemente es un chiste, pero tal y como se desarrolla la acción parece que se será una alumno muy aventajado.
Un beso
El ingenio es algo que no tiene precio.
trimbolera Y más si tiene una rápida contestación como en este caso.
Un alumno inteligente
un abrazo
mjesus Efectivamente eso parece.
Un abrazo
Un texto que refleja, con sentido del humor, las diferencias de criterio que puede haber entre profesor y alumno y también la insolencia de ambos que les impide dialogar sobre sus diferentes opciones.
He llegado a tu blog porque me ha interesado el comentario que has dejado en el blog de Nélida, pues acabo de escribir un poema coincidente con tu opinión.
Un saludo.
sinrimas Seguramente este alias tuyo me cuadrara mucho más que a ti ya que yo siempre durante mi vida profesional he sido de ciencias.
Gracias por la visita y el comentario.
Un saludo
Un par de alumnos como ese y ya me imagino al profesor cambiando de trabajo.
Una mirada… No me extraña que luego cojan un mes de baja por depresión.
Jajajaj, qué insoportable!
Besos.
Crónicas de una Española en Viena Un poco repelente si que es.
Besos