Un transportista llevaba una partida de pingüinos hacia el zoológico, cuando a medio camino se le estropea el camión refrigerado.
Preocupado, por que aumente excesivamente la temperatura y afecte a los pobres pingüinos trata de reparar el problema y ve pasar un camión repartidor de leche consiguiendo que se detenga.
Entonces le dice al lechero : – Mira, te voy a dar 500 euros para que me hagas el favor de llevar estos pingüinos al zoológico.
El lechero acepta el dinero y se lleva con gusto los pingüinos en su camión refrigerado.
Mientras tanto, el transportista logra arreglar el daño, y de inmediato enfila hacia el zoológico.
En cuanto llega, ve salir al lechero, con los pingüinos detrás de él, en fila. El chófer le pregunta al lechero:
– ¿A donde vas con los pingüinos?
El lechero se lo queda mirando y le responde:
– Mira, ya los llevé al zoológico, pero como me sobró dinero, ahora los pensaba llevar al cine…
jajajajaja 🙂
Salud
Genín Me alegro que te haya arrancado una sonrisa.
Saludos
¡Mira que atento el lechero!
Calandra Un padrazo ¡oiga!
Tomaaaaaa !!!
trimbolera Siempre hay personas buenas por la vida.
¡Genial! ese seria un buen padre jajaja
Ester Quizá se pasara y le tomaran el pelo de bueno.
Abrazos
A un cine regrigerado, me supongo…
Jesus A un cine de verano al aire libre…
– Jubi, dile que estaban en el Polo Norte.
Espero que las palomitas y los refrescos, por lo menos, las pagaran los pinguinos.
Muy bueno.
Saludos
Charles de Batz Me temo que como no llevan bolsillos no tendrán dinero, así que tendrán que discurrir para poderse pagar unas chuches, claro que si emplean su encantos personales seguro que se las dan gratis.
Saludos
…y luego a cenar y de tragos, jajaja.
Me encanta el chiste.
Una mirada… Pero primero habría que buscar uno de esos ice bar (bares de hielo ) que proliferan en muchos sitios ya que en caso contrario con el ambiente tan caldeado que suele haber se «acatarrarían» de calor.
Anda que los pingüinos no iba a estar paseados… Cualquiera los tiene luego encerrados en el zoológico.
Senior citizen Para que descansaran un poco se los llevaba el lechero al cine.
ja,ja,ja, muy ingenioso. No me lo esperaba.
Tawaki Me pasó lo mismo al leerlo la primera vez.
Jajajajaja, vaya con el lechero.
Besos.
Crónicas de una Española en Viena El lechero resultó ser un padrazo.
Besos