Asesinos terroristas ha segado la vida de dos guardias civiles.
Una bomba lapa adosada a su todoterreno estalló sobre las 13.50 horas en Calvià (Mallorca).
Carlos Sáenz de Tejada García, de 28 años, y Diego Salva Lezaun, de 27 años, han fallecido en este criminal atentado.
Mi condolencia a las familias.
Sí, nuestras condolencias a las familias de esos guardias civiles que perdieron sus vidas en el atentado de ayer en Mallorca. Y por las demás victimas de estos despiadados matarifes que, para mayor saña, se disponen a festejar el cincuenta aniversario de su puesta en escena con casi un millar de muertos a sus espaldas.
Que acabe ya su macabra historia ¡Asesinos!
Ayer fue un día de silencio de todos los Internautas por los asesinatos de esos dos comnponentes del Benemérito Cuerpo de la Guardia Civil por esa banda terrorista llamada ETA, una banda de criminales, asesinos y malnacidos y escoria de la humanidad.
A las famlias de Carlos Sáenz der Tejada y Diego Salva Lezaun, mi más sentido pésame y condolencia y como no para todos sus compañeros Guardias Civiles de España.
La verdad es que poco podemos hacer para ayudar a los centenares de personas afectadas por los atentados de forma directa (y los daños materiales son los más vanales).
He escuchado en la tele a un político (no sé de qué partido) diciendo que ojalá les hubiera explotado la bomba a los terroristas. Pues sí. Ojalá. Creo que no tengo esa amplitud de miras como para poder ver una solución al problema de una tierra preciosa y de gente (normalmente) preciosa.
Lo único que se me pasa por la cabeza es que deberían de haber pasado de moda. Y aunque sigo pensando que la vida en el País Vasco no es un camino de rosas…gran parte de la culpa la tiene esa cierta tolerancia que se respira. O esa «aceptación». (ad+ del pasotismo de todos los demás, entre los cuales me incluyo)
Un saludo Jubi
Es una monstruosidad. Cuando oigo a todos los políticos insistiendo en que no nos rendiremos y que el destino de esta gentuza es la carcel y la aniquilación de la banda, me pregunto que sentirán los padres, hermanos, amigos de estos dos chicos. ¿Hasta cuando tendremos que soportar tanta crueldad sin sentido?