Esta leyenda se la dedico a tod@s l@s visitantes de este blog.
Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga.
Ésta huía rápido con miedo de la feroz predadora y la serpiente al mismo tiempo no desistía.
Huyó un día y ella la seguía, dos días y la seguía… Al tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y le dijo a la serpiente: ¿Puedo hacerte tres preguntas?
– No acostumbro dar este precedente a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar, contestó la serpiente…!!
¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? preguntó la luciérnaga.
– No, contestó la serpiente…!!!
– ¿Yo te hice algún mal ? dijo la luciérnaga.
– No, volvió a responder la serpiente.
– Entonces, ¿por qué quieres acabar conmigo?
– ¡¡¡Porque no soporto verte brillar…!!!
Moraleja: Muchos de nosotr@s nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos: ¿Por qué me pasa esto si yo no he hecho nada malo, ni daño a nadie?
Sencillo es de responder… Porque no soportan verte brillar……!!!!
Cuando esto pase, no dejes de brillar, continúa siendo tú mism@, continúa y sigue dando lo mejor de ti, sigue haciendo lo mejor, no permitas que te lastimen, no permitas que te hieran, sigue brillando y no podrán tocarte… porque tu luz seguirá intacta. Tu esencia permanecerá, pase lo que pase….. Se siempre auténtic@, aunque tu luz moleste a los predadores!!
Recibido por correo. Gracias Luis.
Bonita historia y muy acertada. Yo también me siento luciérnaga… y al que le moleste la luz que se aguante.
Un besote
Impresionante leyenda,»La envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come.»Francisco de Quevedo .
«Qué es un envidioso? Un ingrato que detesta la luz que le alumbra y le calienta.»Victor Hugo
Lo importante es no perder esa luz tal cual nos dices. Un Abrazo
como me gusta que otros sientan la verdad como yo la siento veo que mis pensamientos tambien son compartidos por los bloqueros. gracias por rebobinar a los inicuos. magu.
Es cierto, pero también lo es que saber brilar sin molestar es un arte entre las artes
Intrigante historia aunque al final un poco rebuscado. Es parecido a la historia del escorpión que acepta que la rana le ayude a pasar el río sobre su lomo y cuando están a medio camino, el escorpión pica a la rana y la rana le pregunta porque lo hace, si así ella va a morir y morirán los dos, y el escorpión le responde que lo ha hecho porque está en su carácter. La serpiente debería haber dicho que ella comerá a la luciernaga porque es estúpida, y ser estúpida, está en su carácter. Porque si la luciernaga no está en su cadena trófica, comerse a la luciernaga puede conducirle a que muera electrocutada. Bueno, entretenido de todos modos.