Un viejo tenía un lago en su finca. Después de mucho tiempo, decide ir a ver si estaba todo en orden.
Cogió un cesto para aprovechar el paseo y traer unas frutas por el camino.
Al aproximarse al lago, escucho voces animadas. Vio un grupo de mujeres bañándose, completamente desnudas.
Al verlo todas se fueron a la parte más honda del lago, manteniendo solamente la cabeza fuera del agua.
Una de las mujeres gritó: -No saldremos mientras usted no se aleje!
El viejo respondió: -Yo no vengo hasta aquí para verlas nadar o salir desnudas del lago!
Levantando el cesto, les dijo: – Estoy aquí nada más para alimentar al cocodrilo…
Edad, experiencia y oficio, siempre triunfaran sobre la juventud y el entusiasmo.
Recibido por correo. Gracias Luis.
jajaja más vale el diablo por viejo que por pellejo jajaja
¡Acertado el comentario de Pilarcica!
También hace falta repris mental para ser rápido y oportuno en las respuestas. A mi me parece que a veces esto se pierde con los años…Al menos yo lo voy perdiendo.
Buen humor para empezar la mañana.
Un saludo.
Claro, esos van a ser son los famosísimos «cucudrulos manzanívoros», que comen (arrebolados ellos) fruticas en la palma de nuestras manos
Useasé, como las palomicas del Pilar; aunque algunas de esas, pssssttt, son un poco «cabronas»
yo con la edad he perdido otras cosas, pero nunca el repris mental
Alguien midió la velocidad a la que las chicas salieron del agua?
pilarcica Tienes mucha razón.
Chela Yo también pierdo reflejos. Estoy casi siempre a la sombra para que no se refleje mi calva.
Saludos
celebrador Cuando el hambre aprieta no hay manzana que se resista.
EDUARDO Yo el reprís mental tampoco lo he perdido, lo malo es que cuento hasta cien antes de contestar y cuando me quieren oír ya se han ido todos.
Magda Les hice una foto al salir del agua y solamente salió una estela de gotitas de agua, las chicas no aparecían en la foto.