La melaza o miel de caña es un producto líquido y espeso derivado de la caña de azúcar, y en menor medida de la remolacha azucarera, obtenido del residuo restante en las cubas de extracción de los azúcares. Su aspecto es muy similar al de la miel aunque de color parduzco muy oscuro, prácticamente negro y muy espeso. El sabor es dulce, ligeramente similar al del regaliz, con un pequeño regusto amargo.
La melaza se emplea principalmente como suplemento energético para la alimentación de rumiantes por su alto contenido de azúcares. Una pequeña porción de la producción se destina al consumo humano, empleándola como edulcorante culinario. También se utiliza en la elaboración del ron (Bebida alcohólica).
Hecho este inciso voy con la historia.
Boston, 15 de enero 1919, un miércoles. Era cerca del mediodía en Purity Distilling Company. La gente en Boston se va a sus negocios como de costumbre. Sólo un pequeño detalle parecía fuera de lo común, era que la temperatura había subido bruscamente después de varios días bajo cero. El deshielo repentino había levantado el ánimo de todos.
Pero se avecinaban problemas, quince metros sobre nivel de la calle en forma de un tanque de hierro fundido que contenía 8,700,000 litros de melaza. La melaza es propiedad de la empresa Alcohol Industrial Unidas, fue programada para ser convertida en ron, pero este lote en particular nunca llegaría a la destilería.
El tanque de hierro de media pulgada de espesor, de 5 m de altura, y 27 m de diámetro explotó en tres grandes pedazos. La fuerza de la explosión demolió varios edificios cercanos, incluyendo una estación de bomberos, que fue aplastada por uno de los pedazos del tanque, y las oficinas de la compañía.
Una enorme ola de melaza de entre 3 a 5 metros de altura fluía con una rapidez de 56 km/h por las calles de los alrededores, empujando los edificios de sus cimientos y volcando vagones, carros, caballos y automóviles. La ola de melaza tuvo la fuerza suficiente para dañar los railes de tren de la colindante Boston Elevated Railway ‘s en Atlantic Avenue aplastando su estructura y sacando fuera de las vías un vagón de ferrocarril, mientras las calles se llenaban rápidamente con los desechos de la pegajosa sustancia hasta casi un metro de altura.
Una vez que se escuchó el estruendo nadie tuvo la oportunidad de escapar. Los edificios parecían temblar como si estuvieran hechos de cartón.
Las labores de rescate comenzaron de inmediato, pero la mayoría de los que se aventuraron en el desastre rápidamente quedaron atascados en la melaza, y tuvieron que rescatarse a sí mismos.
Las bajas fueron, 21 muertos, en su mayoría debido al aplastamiento por escombros y la asfixia y 150 heridos, los médicos y cirujanos establecieron un hospital improvisado en un edificio cercano. Los equipos de rescate encontraron dificultades para hacer su camino a través del jarabe para ayudar a las víctimas. Les tomó cuatro días antes de que dejaron de buscar a las víctimas; muchos de los muertos estaban tan desfigurados, que eran difíciles de reconocer.
Causas. Son varios los factores que ocurrieron ese día y los días anteriores que podrían haber contribuido al desastre. El tanque fue construido y probado deficientemente. Debido a la fermentación que ocurre dentro del tanque, el dióxido de carbono podría haber elevado la presión interna. El aumento de las temperaturas locales que se produjo en el día anterior también habría ayudado a la subida de esa presión. Los registros muestran que la temperatura del aire aumentó de -17 a 5,0° centígrados.
Una investigación posterior al desastre reveló que Arthur Jell, supervisor de la construcción del tanque, descuidaba las pruebas de seguridad básicas, como llenar el tanque con agua para verificar que no había fugas y el tanque se pintó de color marrón para ocultar las posibles pérdidas.
No tenía conocimiento de la noticia, nunca lo he leído ni siquiera Google le ha dedicado un Doodle, así que me encanta tu interés por contarnos estas cosas. Desde luego pone de manifiesto que sinvergüenzas los ha habido siempre y en todos lados. Abrazos
Ester Normalmente Google no crea doodles de cosas desagradables, de guerras, de religiones, así que por ello nunca creo que lo llegue a publicar.
En mi caso en el momento que veo alguna reseña curiosa o que me pueda interesar por cualquier motivo, trato de seguirle la pista, si consigo algo aceptable lo publico, en caso contrario servirá para enriquecer mis conocimientos, pero no verá la luz al menos en mi blog. En este caso muchas noticias estaban en inglés y me ha tocado traducir galones a litros, pies a metros, grados Fahrenheit a Centígrados para hacerlo un poco más entendible.
Un abrazo
Verte arrastrado por una ola de agua ha de ser terrible, pero de miel, inmovilizado como las moscas de la fábula, que muerte mas horrible.
Jesus Opino que las dos cosas son malas, de joven me tiré de cabeza desde un trampolín y di con ella en el fondo de la piscina, entonces creí que me había abierto la cabeza, pero lo más preocupante es que no sabía en que posición me encontraba, dando manotazos a diestro y siniestro, pero reaccioné bien, dejando que la naturaleza hiciera lo que tenía que hacer, sin moverme subí a la superficie y pude respirar. Por supuesto, en la melaza no hubiera podido salir.
Yo tampoco conocía este suceso y me resulta tremendo que cause víctimas algo tan inofensivo y tan dulce, que tomo algunas veces en el desayuno con las tostadas o de postre con el queso fresco.
Senior citizen Desgraciadamente todo es posible en esta vida. Recuerda la fábula de Samaniego:
«A un panal de rica miel
dos mil moscas acudieron
que, por golosas, murieron…»
Yo también suelo ponerme miel en algunas cosas, entre ellas en las nueces.
Que horror, eso si que es morir como moscas. Muchas veces son las que descuidamos la seguridad porque «no pasa nada» … hasta que pasa. Gracias.
trimbolera Así es, murieron como moscas, hoy en día hubieran sido muchos más. Y es que nunca sabemos cuando puede llegar nuestra hora.
Tremendo verte cubierto de ella.
Gracias Emilio. Nos enteramos de muchas cosas por tí.
Un beso.
Laura. M Una muerte dulce, pero muerte al fin y al cabo. Me gusta seguir una noticia curiosa que hay intuido en la red.
Un beso
Precisamente hoy he cortado unas cuantas cañas de azúcar que tengo en mi huerto y durante toda la mañana he llevado un trozo en la boca chupando el azúcar.
Terrible suceso.
Corpi Te puedo asegurar que llevo buscando en los grandes centros comerciales caña de azúcar, ya que recuerdo que antes se vendía, y es debido a que nunca me he llevado un trozo a la boca para aprender a que sabe.
Qué tremendo. Estremece pensar en el sufrimiento de esas desgraciadas personas imposibilitadas para mantenerse a flote en ese líquido denso.
Una mirada… Algo parecido a las arenas movedizas, pero con sabor dulzón, me imagino que la mayoría morirían por golpes de cualquier tipo, ya que si conseguían quedarse de pie, tardarían mucho tiempo en salir, pero no se «ahogarían» en la melaza.
Una entrada muy dulce, pero yo me pregunto el porqué de su publicación ahora, lo digo de buen rollo suponiendo que hay un motivo que yo no he captado de porqué la has resucitado precisamente hoy… 🙂
Salud
Genín En este caso no hay ningún motivo, ya que lleva en el tintero casi 15 días, estuve a punto de publicarla el fin de semana, pero como la cantidad de visitas y por supuesto los comentarios suelen ser menores, lo dejé para hoy lunes, ya que me había molestado bastante en su creación.
¿No te estarás comiendo la plantación de caña de azúcar de la vecina y por eso preguntas? 😀 😀 😉 😮
Saludos
No tenia ni idea pro hiciste recordar al decir que la melaza e mas oscuea, te cuento paque rias o llores o pienses lo que quieras
Lleva poco tiempo en G ox un pueblo de la comunidad Valencia, sabes que soy de Cantabria no se si conoces la figura del afilador, un señor que anuncia con un sonio que afila cuchillos navajas arregla paraguas habo hace 30 años, pues estaba en la casa de unos amigos sola, (estuve unos meses mientras terminaban mi casa) estaba haciendo la comida y no habia un cuchillo que cortata bien, oigo el aviso de afilador supuesto y salgo con varios cuchillos , el señor ssustado por no entendia nada, pobrecillo, vendisa arrope cababazate, uyyy en mi vid a lo habisto, no se si lo conoces es osxuro tambien, xb me pasa de todo,
un abrazo
mjesus Eso del afilador lo conozco, piensa que soy muy viejo, así que lo he visto, lo he oído e incluso he publicado una entrada en su honor, aunque en la actualidad yo me afilo los cuchillos a mi manera.
Hasta tal punto quedan bien afilados que tengo que prevenir a mi mujer para que vaya con cuidado no vaya a ser que se corte.
Pero como me gusta demostrar lo que cuento aquí va la entrada que publiqué hace tiempo. Se titulaba «Profesión perdida (Afilador callejero)» y si pinchas en el enlace vas directo a el.
Un abrazo
Pues menuda muerte tan desagradable morir sumergido en melaza. No conocía esta historia que me parece terrible.
Calandra La verdad es que morir asfixiado en algo similar a la miel no debe de ser nada agradable. Aunque una muerte violenta no creo que nunca sea atrayente.