Al norte de Lanzarote, al pie del Volcán de la Corona, cuya última erupción fue hace 3.000 años, comienza uno de los sistemas de cuevas y tubos más interesantes del mundo.
El jameo se forma al precipitarse el techo del túnel, lo que suele suceder cuando éste sobrepasa los 20 metros de anchura, o bien, cuando los gases acumulados producen una explosión.
Los jameos delatan la presencia de los tubos volcánicos y a través de varios de ellos se puede observar el recorrido de tales tubos. Los Jameos del Agua fueron la primera atracción arquitectónica diseñada por César Manrique en 1968.
Algunas especies animales permanecen aquí algún tiempo o para siempre. Así, los pequeños cangrejos (Munidopsis polymorpha) un cangrejo de apenas un centímetro de longitud, albino y ciego, sensibles al ruido, al movimiento y a la luz, que se han convertido en el símbolo de este lugar.
El fin último buscado por César Manrique para impactar al visitante se ha conseguido con la incorporación de un número mínimo de elementos ajenos al conjunto, que, como las plantas o la piscina, han acabado formando parte intrínseca de los Jameos.
Fuente : Lanzarote.com
Si no se pudiera ver el vídeo en este blog, la dirección es esta
Es un lugar precioso… Abrazos
Ligia He vuelto a releer tus crónicas sobre la isla de Lanzarote. Cada uno a nuestra manera hemos ensalzado la isla, que por cierto se lo merece.
No visité La Graciosa, aunque la vi desde El Mirador del Río, en un día un tanto extraño, lloviznando, con niebla y calima, así que las fotos, quería haber sacado una panorámica no son buenas. Me faltan varias crónicas, pero creo que las resumiré en dos o tres ya que como tu muy bien dices «Como no quiero cansarles más contando mis aventuras por Lanzarote, éste será por ahora el último post que le dedico a la isla.»
Un abrazo.
Todavía conservo fotos de cuando visité Jameos del Agua, parece que hace ya mil años.
Leodegundia En mi caso la mayoría de las fotos que he ido haciendo las he perdido, ahora acabo de comparme un disco duro externo para tratar de conservar las fotos y cosas que no querría perder.