Llegan dos mujeres al cielo y una le pregunta a la otra:
Mujer 1: – Cómo te moriste??
Mujer 2: – Congelada
Mujer 1: – Ay!! que horror!! debe ser horrible morir congelada!!, qué sentiste??
Mujer 2: – Al comienzo es muy feo, primero dan escalofríos, después los dolores en los dedos de las manos y pies, todo se va congelando, después viene un sueño muy pesado, y pierdes la conciencia… y tú cómo moriste??
Mujer 1: – Yo? de un ataque cardíaco, estaba desconfiando de mi marido, creí que me engañaba.
Un día llegué más temprano de trabajar, corrí hasta el dormitorio y él estaba acostado en la cama viendo la televisión, desconfiada corrí al sótano para asegurarme de que no tenía a ninguna mujer escondida, pero no había nadie, corrí hasta el segundo piso, pero tampoco encontré a nadie, después subí hasta el desván, pero al ir subiendo las escaleras, me dio un ataque cardíaco, y caí muerta.
Mujer 2: – Mira que eres inocente! Si hubieras buscado en el refrigerador, las dos estaríamos vivas…
jajaja Pobrecitas, que malos los hombres…
Salud
🙂 Está claro, hay que saber buscar.
Buen día
Genín Yo creo que en este caso habría que repartir responsabilidades.
Saludos
Leodegundia Si hubieran recibido un cursillo intensivo de búsqueda por internet… digo por la casa, esto no hubiera pasado.
jajja. muy buena, me sonreí- Gracias
Paz Me alegro de que hayas sonreído, es bueno hacerlo de vez en cuando.
Por cierto, tu también te debiste de cansar… viniendo desde Chile…
Gracias a ti por la visita y el comentario.