Esta entrada la escribí el 11 de Diciembre de 2005, la he reeditado, y con ligerísimas modificaciones la vuelvo a publicar. Se nota que me voy haciendo mayor y por eso me gusta recordar historias pasadas, pero totalmente reales.
Hoy, como ayer, existen los que piensan que los tiempos pasados fueron mejores que los actuales.
Es posible que alguno tenga razón; después opinamos.
Este post es como consecuencia de una conversación que he tenido este puente, con un compañero de trabajo, también jubilado, sobre lo que se hacía y lo que se disfrutaba en tiempos anteriores al presente.
Os voy a contar a grandes rasgos la vida de mi padre desde 1920, que con 14 años empezó a trabajar, hasta 1943 que fue hecha esta foto. (Era un segundón, y en Aragón los que no son primogénitos no heredan nada más que una pequeñísima propiedad que se la suelen regalar al hermano mayor ya que con eso no se puede vivir, excepto las mujeres que se quedaban en casa para ayudar a su hermano)
Mi padre nació en Bailo (Huesca). A los 14 años, empezó a buscar trabajo por los pueblos de alrededor como segador, recolector de madera, carretero… ocupaciones que podían durar de una a varias semanas.
Trabajó en las obras del ferrocarril, que por entonces se estaban llevando a cabo en la provincia de Huesca.
El salario en los pueblos era pensión completa y alguna que otra ayuda en especie, un celemín de trigo, tocino de cerdo, frutas y poco mas.
En invierno no había trabajo de ningún tipo, excepto cuando trabajó en el ferrocarril.
Durante la guerra civil española ingresó en una compañía (Telefónica), que hasta su jubilación lo tuvo en nómina.
Fué destinado a Madrid, en donde unas veces en la zona nacional y otras en la republicana y siempre que los proyectiles se lo permitían hacía su trabajo, en más de una ocasión en zona de nadie, entre dos fuegos.
El salario que recibía era de 8 pesetas diarias, en total 240 al mes, un kilo de carne costaba 5 pts, si algún domingo por circunstancias adversas tenía que salir a trabajar, ese día lo perdía.
Se casó con mi madre el 18 de Septiembre de 1943, en Madrid en la iglesia de San Agustin.
Alguien les dió 300 pesetas como regalo de bodas. Con ellas se compraron ya en Anzánigo (Huesca); -a la residencia a la que fué destinado- un armario, una mesilla, un juego completo de desayuno para dos personas, compuesto de tazones, platos, cucharas, cucharillas, tenedores y cuchillos, todo ello bañado en plata.
El medio de transporte entre pueblos era el que se ve en la foto, vehículo proporcionado por la compañia para atender a varios pueblos que no estaban juntos precisamente.
En estas condiciones nacimos mi hermana y yo, que soy el mayor, y a los dos, privándose de muchas cosas se nos dieron unos estudios, que han servido para defendernos en esta vida.
Los tiempos han cambiado por supuesto, pero hay todavía gente que opina que antes se vivía mejor.
Un entrada semi biográfica entrañable, yo soy de las que defiende que ahora se vive mejor, solo que antes eramos mas jóvenes. Abrazos
Ester La vida ha cambiado mucho y lo de vivir mejor o peor realmente va en función de como se lo quiera tomar uno, no obstante hay adelantos fabulosos y en otros casos inseguridad ciudadana dependiendo por donde se mueva uno.
Abrazos
Bueno, depende, todo depende, como dice la canción, de según como se mire todo depende…
Es una bonita historia la de tus padres. 300 pesetas eran muchas pesetas…
Abrazos
Ligia Es cierto depende… Fíjate si serían 300 pesetas que era casi el 25% más que el sueldo que entonces cobraba mi padre.
Abrazos
Gracias por los enlaces musicales…
Ligia No me tienes que dar las gracias, yo he sido el primero en aprovecharme y escuchar un par de veces las coplas.
No se que decirte, en fin, ahora, jubilados, no pegamos golpe y nos pegamos la vida padre, y con esto de Internet se lo pasa uno pipa, pero amigo, aquella juventud, al menos yo, la echo mucho de menos, ten en cuenta que estabamos construyendo nuestras vidas y teníamos un futuro por delante…
Salud
Genín Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro…
y a veces lloro sin querer…
Eso es lo que la mayoría echamos en falta.
Saludos
Una bonita historia y muy tierna por la parte biográfica que lleva de tu familia, de tu padre más en concreto. Y por ende del resto, hasta llegar a tu hermana y a ti.
Fueron tiempos difíciles pero seguro que tuvieron muchos momentos felices.
Ahora siendo tiempos menos difíciles que aquellos, no tengo tan claro que se experimente la misma felicidad.
La vida cambia mucho, lo bueno de los cambios es que sean para mejor. Pero así como hay cosas que dependen de uno mismo, y otras que se nos escapan.
Preciosa entrada, Jubi. Gracias por compartirnos este pedacito de tu historia.
Un beso.
Nélida Visto de manera retrospectiva es bonito, cuando menos recordarlo, sin embargo en ocasiones pasábamos muchas penalidades, también por supuesto momentos realmente inolvidables, así que lo de vivir mejor o peor es muy relativo.
Un beso
Alguien me contó que Napoleón, en toda su gloria, debió de pasar alguna noche en vela por dolor de muelas, y hoy en día con un calmante sigues durmiendo. Evidentemente se vive mejor, faltaría mas.
Jesus Antes por regla general se vivía bastante menos tiempo, hoy en día la esperanza de vida está alrededor de 85 años, claro que mi padre falleció a los 92.
Supongo que opinar si se vive mejor ahora o antes todo depende de como lo haya pasado cada uno. De todas formas hay cosas que estaban mejor antes y otras ahora.
Calandra Tienes razón, aquí se podría aplicar el refrán de que «Cada uno habla de la feria como le va en ella.»
Pocos años antes de eso, mi padre como funcionario estuvo trabajando desde los 20 años en que sacó las oposiciones a los 70. A ver si ahora alguien alcanza los 50 años de cotización…
Senior citizen Hoy en día es prácticamente imposible, no obstante en mi caso si no me hubieran prejubilado tan joven hubiera superado los 50 años.
Y a quien no lo prejubilan… se jubila él en cuanto tiene cotización suficiente.
Senior citizen Hay alguno que aguanta casi como los señores diputados.
Y así fueron construyendo el futuro; unos abnegados padres con una básica finalidad, sacar a su familia adelante y situar a los hijos en el mundo en mejores condiciones de los que ellos recibieron y consiguieron. Hoy se les recuerda con cariño y gratitud.
Frajayo Así es, mis padres se privaban de muchas cosas pensando en sus hijos, para tratar de sacarlos adelante pensando en que vivieran mejor que ellos.
Cuantas veces recuerdo a mi padre cuando contaba que, para alargar el jornal, iba a ayudar a segar a una casa del pueblo a cambio de un pan !!
trimbolera También se lo ganó el hombre y es que salvo que hubieras nacido en un familia rica, tenían que hacer de todo un poco para incrementar ligeramente el jornal que ganaban.
Un bonito homenaje a tus orígenes emilio. Pienso que ahora vivimos mejor. La vida de nuestros padres fue mucho más dura que la nuestra, y así y todo nos sacaron adelante.
Besos.
Laura.M Es contar lo que ellos vivieron y me fueron inculcando. Mi madre también se ganó el cielo trabajando desde que tenía 12 ó 14 años haciéndose cargo de sus 5 hermanos por fallecimiento de sus padres.
Besos
Escaseaba lo material y abundaba lo inmaterial. No había cura para muchas enfermedades, se llegaba a la orfandad a muy temprana edad y tenían que ganarse la vida. Hoy los chicos todo tienen hecho y fácil… pero son menos felices.
Yo soy de las que defienden la posición de que se era más feliz en épocas pasadas.
Un abrazo.
Sara O. Durán Nos faltaba de todo… de todo lo que tenemos en la actualidad y sin embargo vivíamos más sanos y seguramente más felices ya que no echábamos en falta ninguna de las moderneces actuales.
En la calle nos divertíamos y si alguien faltaba alguna tarde, nos preocupábamos por ver si le pasaba algo, e íbamos a su casa a preguntar. Jugábamos en medio de la calle ya que no estaban asfaltadas y no circulaban coches.
Un abrazo
Me gustó mucho conoce parte de vuestra historia familiar, porque se aprecia el amor y el sacrificio de unos padres hacia sus hijos en tiempos más que difíciles.
Yo lo tengo claro. El que piense que algún tiempo pasado fue mejor merece que le trasladen allí.
Tawaki Mis padres se privaron de muchas cosas para tratar de dar una educación a mi hermana y a mi, tanto es así que mi padre se jubiló a los 67 años (entonces con 65 años era voluntario y a los 70 forzoso) al conseguir que mi hermana se independizara consiguiendo un buen trabajo, yo ya lo había hecho. Y comentó ahora podemos disfrutar nosotros un poco. Mi padre falleció con 92 años y mi madre con 98.
Una historia para la Historia, de las que no recogen los libros pero que son el sembrado de la cosecha del presente. Nadie debería olvidar el esfuerzo de sus ancestros, de esas gentes voluntariosas que lucharon por dar a los suyos una vida mejor.
Una mirada… Yo desde luego siempre lo he tenido presente y les he agradecido todo lo que han hecho conmigo y por supuesto también con mi hermana.