Enviar el correo ha sido un trabajo importante desde hace siglos, y el hombre se ha valido de muchos medios para ello; actualmente el correo electrónico es el medio más eficaz, pero no siempre fue así.
Por ejemplo, en Alaska y Canadá se utilizaron perros que tiraban de trineos donde se transportaba el correo, en Alaska también se utilizaron renos. En Rusia, el servicio postal incluía caballos, esto fue en los siglos XIII al XIX. Las palomas se han utilizado también para transmitir mensajes, como en la antigua Grecia.
En una localidad de Bélgica en 1879 contrataron a 37 gatos para repartir el correo. Las cartas se colocaron alrededor de los cuellos de los gatos dentro de bolsas impermeables para que los habitantes de Lieja y pueblos circundantes pudieran estar en contacto. Como informó el The New York Times, había un peligro, pues los perros eran los enemigos más temibles para los gatos y el mensaje se podía perder.
¿Cuál fue el resultado por utilizar gatos en el correo?
Bueno, un gato muy responsable entregó su carta en menos de cinco horas, pero no podemos decir lo mismo de los demás. Como es natural en los gatos, parece que nunca tienen prisa por nada, y no tienen mucho interés en ciertas cosas, por lo tanto algunos tardaron hasta un día para llegar con el mensaje a sus casas. Tal vez por eso, los gatos fueron despedidos y el servicio postal con gatos no duró mucho.
Es que querer que un gato se comporte como quiere un ser humano, es desconocer a los gatos.
Calandra Yo nunca he tenido una gato en casa, pero a la vista de los comentarios que hacéis no creo que fuera buena idea el contratar a gatos para esta misión.
No se ni como se les ocurrió esa idea … poco conocían a los gatos !!
trimbolera Te iba a proponer que le dieras trabajo a Bolo, para que ganara un dinerillo, pero me temo que no estará por la labor.
Supongo que despidieron tambien al genio que tuvo la ocurrencia, de las cosas que nos enteramos aquí. Abrazuco
Ester Las crónicas no dicen porqué motivo fueron contratados ni tampoco el que tuvo tan brillante idea.
Abrazos
A quién se ocurre!! Aunque el Servicio de Correos «humano» no te creas que tarda mucho menos, je, je… Abrazos
Ligia Últimamente, al menos en mi urbanización y desde que han cambiado al antiguo cartero, el Servicio de Correos “humano” falla más que una escopeta de feria.
Abrazos
A quien pagarian la seguridad social.
Jesus Se la guardaría el Estado para cubrir otras necesidades.
Una curiosa e interesante parte de la historia de vari0s lugares y épocas.
A mi particularmente me ha llamado siempre mucho la atención, esa eficacia de las palomas mensajeras aún encontrándose tan lejos el remite y remitente. Esa orientación y precisión.
Un beso y feliz fin de semana!!!
Nélida Con respecto a las palomas mensajeras, he hecho comentarios sobre ellas, pero no tengo una entrada para poder informarme sobre sus actuaciones. En la actualidad creo que ya no existe ninguna, trataré de informarme.
Un beso y feliz fin de semana!
No te creo. Jajajajaja
Besos
Crónicas de una española en Viena Creo que nunca se me ha deslizado ninguna mentira en los blogs, pero es cierto que se me ha olvidado poner las fuentes de donde he copiado la información. Ello en parte ha sido debido a la cantidad de sitios que se repite.
Te dejo unos cuantos enlaces, para que veas que no miento.
gftvtucanal, en español.
mental floss, en inglés.
Planeta curioso, en español.
En Facebook existen varias entradas unas en español y otras en inglés.
Besos
Ahora me explico porqué el servicio postal funcionaba antaño aquí de esa manera… también había algún que otro animal. Recuerdo el caso de unos amigos que me mandaron una postal desde Almería en julio y me llegó a casa en noviembre. Supongo que había más de una tortuga en la nómina del servicio postal español.
Hoy en día, sin embargo, no parece que sea así, pues los envío que todavía recibo denotan que han estado en manos -nunca mejor dicho- de alguien con un defecto muy humano: la curiosidad; pues me lo encuentro muchas veces abiertos o desprecintados sin ningún recato. Bueno, quizá haya sido algún chimpancé… quién sabe!.
Charles de Batz En cierta ocasión mi problema no fue una tortuga, fue la niebla, además eso de abrir cartas, en la mili lo olían y cuando me mandaban 100 pesetas dentro de alguna, unas cuantas me desaparecieron.
Voy con la niebla, la foto que verás es mía.
Saludos
Interesante. La historias que hay detrás de cada uno de nosotros, y de la su carta me ha traído al recuerdo además las historias de alguien que conozco y que estuvo también allá haciendo lo mismo más o menos por la misma época.
Saludos!
Charles de Batz Yo fui el ultimo llamamiento que estuvo en Sidi Ifni, aunque no fui de los últimos que salieron, ya que seis meses antes me destinaron con una emisora militar a las Palmas de Gran Canarias, a la representación de Ifni en las Palmas.
Saludos.
P.D. Todos me llaman de tu, me hace sentirme más joven, dejo a tu elección la manera de tratarme.
Como los gatos les quieran quitar el puesto de trabajo a los carteros, iban a haber liebre a la parrilla en masa…jajaja 🙂
Salud
Genín No se me había ocurrido… Ahora ya se el final que tuvieron los gatos carteros y no fue precisamente que los despidieran.
Saludos
Eeeeso… Seguro que fue eso.
Senior citizen Yo conscientemente no he comido gato, pero a mi madre se lo prepararon sus hermanos y por supuesto comieron todos y cuando estaban terminando los que lo sabían empezaron a maullar.
Mi madre les dijo que le había sabido muy bueno, era la época del hambre en España.