¡¡Qué barbaridad!! Voy a tener que hacer un curso para terminar de interpretar algunas de las nuevas señales que se van a poner en determinados sitios.
Diego decidió girar la cabeza, volver a la conversación con el grupo y darle un trago a la cerveza que reposaba en la mesa. De fondo, una mujer seguía gritándole mientras se sentaba en la terraza. No le había gustado que Diego entrara al baño de mujeres y comenzó a reprochárselo con gritos e insultos que empezaron en el aseo y acabaron fuera. Por aquel entonces, Diego no se hacía llamar así ni se identificaba como hombre. Sin embargo, la mujer así lo interpretó por su estética andrógina (1). Esta anécdota real ocurrió el verano de 2015 en un bar de la plaza madrileña de Lavapiés, pero podría haber pasado en cualquier otra.
‘Te has equivocado de baño’, ‘¿qué haces aquí?, ‘no sé cómo no te da vergüenza…’ son comentarios frecuentes que se suman a miradas de extrañeza o rechazo, a agarrones de brazos o a la imposibilidad de pasar porque la persona se pone delante.
Hombre o mujer a ojos del resto -Alex de la Croix, performer y participante en Inesperadxs, opta por no etiquetar su identidad y asegura que su expresión «va mucho más lejos» que lo que se llamaría género neutro o no-binario. Por ello confiesa que no se siente cómodo en el baño de hombres porque es observado, pero tampoco en el de mujeres, donde le han llamado la atención en más de una ocasión. «En ninguno me siento aceptado», dice.
Los baños mixtos ¿son la solución? -Aitzole Araneta, activista transfeminista y sexóloga propone varias soluciones, desde la instalación de baños mixtos hasta aseos sin símbolos o con criterios totalmente diferentes y más creativos. En este sentido cuenta una anécdota: «En muchos sitios, ya que los baños con el muñequito con pantalón van más rápido, accedo a ellos y los hombres protestan, a lo cual respondo que ‘este es el baño de quienes llevan pantalones…¿y yo qué llevo? pantalones’. Se quedan sin palabras».
ZEC (Zaragoza en Común) estudiará cambiar los carteles de los aseos para que recojan una mayor «diversidad sexual» -El alcalde, Pedro Santisteve, afirma que el objetivo es «romper con el binarismo» en las instalaciones municipales, tras presentar un proyecto artístico que afectará a cuatro equipamientos del Consistorio.
El alcalde Pedro Santisteve y la concejala de Educación e Inclusión, Arantza Gracia, en la presentación de las acciones organizadas por el Ayuntamiento con motivo del Día Internacional de la Despatologización Trans. Foto de Daniel Marcos/Ayuntamiento de Zaragoza
El programa incluye unas intervenciones artísticas que se van a instalar en los baños de cuatro centros públicos municipales (la Casa de la Mujer, Etopia, el Centro de Historias y la Harinera). Se trata del proyecto ‘Inesperadxs’, de María Bastarós y Álvaro Albajez, y consiste en la instalación de vinilos en los aseos que muestren «la diversidad de cuerpos y de identidades» y cuestionen «las imposiciones sociales en torno al género».
El alcalde Santisteve ha asegurado que esta iniciativa artística «podría ir extendiéndose» a otros equipamientos del Ayuntamiento de Zaragoza. Lo ha supeditado al resultado de este proyecto en los cuatro centros citados, pero ha afirmado que el objetivo es «romper el binarismo en nuestras propias instalaciones».
Cuando vaya a alguno de estos sitios procuraré ir meado y cagado para evitarme problemas, no me gustaría encontrarme con una sirena y que sin querer me diera un coletazo, perdón por mis expresiones zafias.
(1) [organismo] Que reúne los dos sexos en el mismo individuo.
adjetivo/nombre masculino y femenino [persona] Que tiene rasgos corporales ambiguos, que no se corresponden con los propios de su verdadero sexo.
Información extractada de El Diario y El Heraldo
La verdad es que hay algunos casos que te crean dudas. Ganas de complicarlo.
jesus Me temo que se gastarán un dinero con ese cartel anti «sexista» y no durará ni un año, de hecho en la imagen del alcalde de Zaragoza además de cartelón, existen las antiguos carteles de hombres y mujeres.
Los que si estan claros los que tienen un cambiador para bebes y los que estan señalizados con una silla de ruedas, obviamente tendré que ir al segundo, parecido es lo que pasa con los semáforos, este fin de semana viajamos a otra ciudad y mientras cruzas el muñequito es una mujer, un hombre, una mujer que para cruzar te tienes que ir cambiando de ropa o de sexo. Creo que debemos dejar de sembrar tontos, se reproducen. Abrazos
Ester Lo de los cambiadores para bebés, se quejan las mujeres de que solamente están en sus servicios, los servicios señalizados con sillas de ruedas, donde existen, creo que están en los de hombres y mujeres. Y con respecto al resto, más igualdad real en todos los términos entre hombres y mujeres y olvidarse de sandeces.
Me parece que en lugar de aclarar las cosas lo que hacen es complicarlas. ¿Me podrías explicar como tendría que interpretar ese cartel de la sirena con bigote si me la encuentro en algún sitio?
Calandra Esa pregunta tiene fácil contestación, al igual que hay hombres y mujeres, también hay delfines y delfinas, orcas y orcos, truchas y truchos, sirenas y sirenos…
Todo eso está muy bien, pero ¿no es un poco difícil encontrarse con ellos como para tener que poner un cartel?
Calandra Es difícil, tienes razón, así que nos quedaremos con el cartel que van a poner en la Universidad del País Vasco (UPV), para «personas no binarias«.
¿¿¿???
Tendrían que añadir otro cartel más: el de que para usar el baño hay que pedir la llave en el mostrador. Sin eso, en muchos bares ni hombres, ni mujeres, ni… nadie.
Senior Citizen En sitios oficiales o grandes establecimientos no suelen estar los servicios cerrados, cosa que existe como tu muy bien indicas en determinados bares e incluso en mercados de proximidad, aunque suele existir un letrero que dice algo así como : No utilizar los aseos u otras instalaciones de los establecimientos de restauración por las personas que no sean clientes, salvo autorización del titular del establecimiento.
Menos cartelitos y más educación y respeto por los demás, que es lo que de verdad hace falta.
Tawaki Recuerdo una situación un tanto embarazosa que me/nos ocurrió en Venezuela. En una parada de un autobús de línea entre poblaciones, además de tomarnos un refresco, muchos fuimos al servicio y al entrar nos encontramos con que el baño de caballeros estaba lleno de mujeres, después de volver a mirar en las puertas los cartelicos vimos que efectivamente era el servicio para hombres.
Volvimos y les dijimos que se fueran a su baño, pero ellas nos contestaron que si esperaban a que todas terminaran en sus servicios, seguro que perdían el autobús, así que como pudimos y entre ellas que estaban esperando los servicios para sentarse, nosotros nos aliviamos en los urinarios que había en la pared para caballeros.