El 25 de mayo de 1810 fue depuesto el último virrey español que gobernó desde Buenos Aires, organizándose la Primera Junta de gobierno, y el 9 de julio de 1816 fue proclamada formalmente en Tucumán su independencia como país libre y soberano.
Los argentinos residentes en Aragón conmemoran esta día con espectáculos de canto, folclore y tango.
Coreografías de nuestros bailes típicos y canciones que nos llevan de nuevo a nuestra tierra, todo esto en el marco conmemorativo de la celebración del Bicentenario Argentino.
Con la presencia de Carlos Porcel de Peralta.
La entrada es libre y gratuita
Fecha : Domingo 30 de Mayo
Hora : 11,00
Lugar : Centro Cívico Río Ebro (Edif Fernández Ordóñez) (Zaragoza)
Calle : Av. María Zambrano 57 (Actur – Rey Fernando)
Aquí hay muchos argentinos, pero no parece que hayan organizado nada así. Esperemos, pues aun queda mucho bicentenario.
Pues no sabía de esta celebración, feliz bicentenario!
No me acordaba de la fecha. Ahora mismo me voy a visitar a mis amigos, y amigas (como matizan ahora los políticos) de la Argentina para desearles felicidad.
Y tu aprovecha para marcarte un tangazo en esa fiesta.
A mi me queda lejos y por aquí no oí que celebren nada el grupo de residentes argentinos, o quizás yo no estoy enterada.
¡Buenos días Jubi!
🙂 Por si no teníais bastante con vuestras fiestas, ahora disfrutáis también de las de Argentina, espero que baileis mucho.
Un abrazo
Senior citizen, Magda, Chela, leodegundia En Aragón y en concreto en Zaragoza, de vez en cuando nos pedimos ayuda para publicar determinadas noticias y cada uno con sus medios nos hacemos eco de ellas.
Ello no quiere decir que vayamos a los eventos que publicamos en nuestros blog o en las redes sociales.
Saludos
Muchas gracias, os lo dice una Argentina de nacimiento (sin raíces americanas, todos mis antepasados bajaron de los barcos que vinieron de Europa).
En esto de los festejos, si son para unir, bienvenidos sean.
Si además sirven para aclarar, me permito recordar el silogismo de Chuquisaca.
La destitución del rey español Fernando VII por el imperio napoleónico, (23 de septiembre de 1808) generó un debate sobre la legitimidad del gobierno virreinal.
Fue entonces que Bernardo José de Monteagudo escribió este texto (silogismo, que le dicen)
«¿Debe seguirse la suerte de España o resistir en América? Las Indias son un dominio personal del rey de España; el rey está impedido de reinar; luego las Indias deben gobernarse a sí mismas»
Más claro, el agua clara.
Fuente:
Pigna, Felipe (2007). Los mitos de la historia argentina, 26 edición, Argentina: Grupo editoral Norma. ISBN 987-545-149-5.
(un poco de revisionismo histórico puede ayudar a ver los sucesos desde -más- afuera y con menos folcklore)
Nfer Gracias por la aclaración, no conocía El silogismo de Chuquisaca, silogismo de Charcas o silogismo altoperuano y cuando algo que no conozco me lo comentan busco información en lo que tengo mas a mano, en este caso es la red.
Por ello he ido a la primera referencia : http://es.wikipedia.org/wiki/Silogismo_de_Chuquisaca he seguido rebuscando y he ido a Bernardo de Monteagudo, luego a la Revolución de Chuquisaca y aunque de momento no he completado mi información lo iré haciendo.
Esto me recuerda una visita de trabajo que hice a Venezuela hace 30 años, estuve 6 meses y dependiendo de los ambientes donde te movías siempre había alguna persona que con razón decía «Los españoles sois unos asesinos, vinisteis a nuestra tierra a masacrar a los indios, a llevaros nuestros tesoros a…» en otros sitios nos daban las gracias por representar a España -la madre patria, decían- así que inmediatamente me compre el libro «Historia fundamental de Venezuela» para poder comprender a unos y a otros.
Pese a todo he de reconocer que lo que sea acontecimientos festivos para acercar a los pueblos son bienvenidos.
Saludos
Cuando viví un tiempo en Salta dediqué parte de los paseos turísticos a visitar lugares menos «turísticos», por decirlo de alguna manera.
Ahí, en vivo (o muerto) y en directo aprendí algo que siempre repito:
No necesitamos los españoles asesinos ladrones violadores usurpadores etc.
Aquí se las arreglaban solitos para expandir sus imperios, matar, robar,violar, descuartizar y tomar por suyas tierras y riquezas de los legítimos dueños (también aborígenes).
Ejemplo: Lo que fuera el señorío de Tástil.
Los incas no toleraron su rebeldía….y si queréis los europeos sentiros «menos culpables» de reales o imaginarios magnicidios, dejo este enlace:
http://es.wikipedia.org/wiki/Tastil
Saludos desde Argentina.
Nefer Como decimos en España «En todos los sitios se cuecen habas y en mi casa (en este caso España), a calderadas.
Saludos
Muchos de los comentarios previos a éste, pretenden adjudicar a algunos de los héroes argentinos condiciones que no les competen. Ellos con sus obras comprobadas hicieron lo suficiente por la libertad, de ahí que intentar convertirlos en héroes como Superman o Batman, resulta fantástico, por lo tanto poco creíble. No es justo que la grandeza de los padres de la patria puedan ser puesta en duda, porque a alguien se le ocurrió incluirles potestades ficticias que, en vez de incrementar su gloria, la ponen en tela de juicio. El Doctor Monteagudo fue uno de los más grandes revolucionarios de la América hispana, un jacobino intransigente con actuaciones patrióticas merecedoras del más alto encomio en el Alto Perú, en Buenos Aires, Chile y el Perú. Fue uno de los más notables luchadores por la independencia continental, pero nada más, su estatura histórica no necesita se pretenda transformarla en la imagen ilusoria de un héroe fantástico de Comics, que todo lo puede. Él no fue autor del silogismo altoperuano, mucho menos de la Proclama de la Junta Tuitiva de La Paz, tampoco fue elaborador de la famosa entrevista entre Atahualpa y Fernando VII. Con lo que hizo estuvo por encima de muchos de los preclaros de su época, el siguiente es un coto informe bibluiográfico.
Bernardo de Monteagudo (1786-1825), patriota, pensador y periodista argentino nacido en Tucumán. Participó en la rebelión de Chuquisaca (1809), en cuya universidad estudiaba, y representó a Mendoza en la Asamblea General Constituyente argentina. Fundó los periódicos Mártir o libre (1812) y El Independiente (1815). Tras la caída de Carlos de Alvear, de quien era partidario y protegido, como director supremo de Buenos Aires, marchó a Chile, y allí participó en la redacción del Acta de Independencia de aquel país (1818). Tomó parte, junto a José de San Martín, en la liberación del Perú (1820) y fue nombrado ministro de Guerra y Marina de la nueva república (1821-1822). Fundador de la Sociedad Patriótica y de la Biblioteca Nacional peruana, su protagonismo y maneras autoritarias le atrajeron la inquina de los dirigentes criollos y fue obligado a dimitir. Murió asesinado en Lima.