Un anciano de 82 años construye un banco en la acera para que su esposa enferma descanse durante sus paseos
Manuel Souto ha decidido tomar cartas en el asunto ante la inacción del Ayuntamiento de A Estrada (Pontevedra). Ante la falta de respuesta a la petición de Manuel de poner un banco en la zona en la que pasea con su mujer. Este decidió construir e instalar un banco para que su mujer María, que está enferma, pudiese descansar durante sus paseos.
Por ello, decidió hacerlo él mismo y colocó un banco con sus propias manos utilizando palés de madera. Aunque no está lijado, barnizado ni anclado al suelo, lo cierto es que cumple su función a la perfección.
«No me llevó ni una hora hacerlo», asegura el anciano, que ha trabajado como tornero y carpintero. «Corté la manera con la maquinaria que tengo, le puse unos clavos y listo».
Manuel Souto lo colocó frente a un establecimiento de su barrio, con permiso del dueño, durante la noche para que se llevara una sorpresa al día siguiente. «Cuando lo vio, le encantó. Me dio un abrazo y un beso», explica. Y parece que no solo a ella le ha gustado. «No está ni una hora libre […] Mi mujer no era la única que lo reclamaba. Hay un señor en el barrio que lo pidió hace dos años y nada, aún sigue esperando».
Fuente : NIUS
Espero que le dejen sentarse los demás. Un beso
-Susana- El banco seguro que está muy concurrido.
Un beso
Que poca sensibilidad tienen algunos políticos
Salud
-Genín- Poca sería algo, pero muchos no conocen esa palabra.
Saludos
Suponiendo que las aceras tengan la anchura suficiente, o una de dos: O, por vergüenza (que ojalá la tengan) instalan mobiliario urbano en la zona o siguen dando la callada por respuesta para ver si la ciudadanía toma ejemplo de este señor…
-Una mirada…- No querría ser agorero, pero me temo que el Ayuntamiento de A Estrada va a retirar el banco por ser incompatible con el resto del mobiliario del municipio. A no ser que se les caiga la cara de vergüenza e instalen uno más apropiado.
Mientras no le hagan pagar por ocupación de la vía pública…
-Senior citizen- Todo podría ser. Me gustaría conocer el final de esta historia, no se si lo lograré.
Maravilloso hacer con las propias manos algo que alegra a los demás, un presente generoso. Estas historias son estupendas. Un abrazo
-Ester- Lo malo es que no llegamos a conocer el final de ellas, esperemos que nadie se lleve el banco, lo destroce, o sea la administración la que se encargue de retirarlo.
Un abrazo
Esperemos que lo dejen… Que no tendrían por que no hacerlo. La hechura ha sido un acto de amor. Y si se necesitan más, que el ayuntamiento se ponga las pilas y pongan más.
Un abrazo.
-Sara O. Durán- Mejor sería que lo retiraran para poner en su lugar un banco del ayuntamiento anclado en el suelo para que nadie se lo lleve y vayan poniendo más bancos allí donde se necesiten.
Un abrazo
Me ha recordado la pelicula Notting Hill en la que Julia Roberts lee la dedicatoria de un hombre a su esposa en un banco de jardín.
Feliz día miércoles.
-Magda- A mi este banco me recuerda otra cosa. En el Canal Imperial de Aragón en una de sus orillas, había una caseta hecha, también con tablas de palé, y en su interior cabían dos personas, escrito en las tablas había un ruego que decía «Por favor respeten, refugio para pescadores mayores»
Duró bastante tiempo, pero al final unos vándalos la destrozaron.
Saludos