El rico erudito.
De Tomás de Iriarte (1750-1791)
Hubo un rico en Madrid (y aun dicen que era más necio que rico), cuya casa magnífica adornaban muebles exquisitos.
«¡Lástima que en vivienda tan preciosa», le dijo un amigo,
«falte una librería!, bello adorno, útil y preciso.»
«Cierto», responde el otro. «Que esa idea no me haya ocurrido!…
A tiempo estamos. El salón del Norte a este fin destino.
Que venga el ebanista y haga estantes capaces, pulidos, a toda costa. Luego trataremos de comprar los libros.
Ya tenernos estantes. «Pues, ahora», el buen hombre dijo, «¡echarme yo a buscar doce mil tomos! ¡No es mal ejercicio! Perderé la chaveta, saldrán caros, y es obra de un siglo…
Pero ¿no era mejor ponerlos todos de cartón fingidos?
Ya se ve: ¿por qué no?
Para estos casos tengo yo un pintorcillo que escriba buenos rótulos e imite pasta y pergamino.
«Manos a la labor.»
Libros curiosos modernos y antiguos mandó pintar, y a más de los impresos, varios manuscritos.
El bendito señor repasó tanto sus tomos postizos que, aprendiendo los rótulos de muchos, se creyó erudito.
Pues ¿qué más quieren los que sólo estudian títulos de libros,
si con fingirlos de cartón pintado, les sirven lo mismo?
Dedicado a: Hay que leer mas (Apolonio), y como muy bien dice en su bitácora tenemos que leer más, en ella veremos rarezas, curiosidades e historias sobre libros, lectores, bibliotecas, librerias, etc.
Y también está dedicado el post a Toupeiro, que tiene que batallar con los clientes de su librería.
Un abrazo a ambos.
Me encantan los libros, me encanta leer… Yo también he conocido a quien compraba libros casi a peso para que pareciera que leía mucho sin haber aberto nunca ejemplar alguno de los que poblaban su librería.
En mi casa (de 45 metros, es como los que propone la ministra), los libros ocupan el espacio más destacado de mi casa. Están en el cuarto de estar, en el baño, en mi cabecera, en la cocina….
Ojalá mi casa fuera más amplia para poder albergar más libros porque mi problema es que me gusta leer «mis» libros, no uso las bibliotecas, y me da mucha penar desprenderme de ellos. Pero, en breve, me voy a ver obligada a hacer como ese otro blogger que los regala.
Ánimo y a leer, que es muy sano.
Desgraciadamente hay muchos»necios» como el del cuento, no saben lo que se pierden al no tener un libro en las manos, abrirlo, disfrutarlo yo ya no tengo donde ponerlos y estoy desesperada por eso porque me gusta tenerlos siempre cerca y a mano. Saludos
Gracias guapo. Un millón de besos
jubilado, tengo que decirle que me he enganchado a su blog.
Me gusta este post, me gusta la lectura y la escritura y el batido de azanoria.
Estamos de estreno en la televisión. http://www.lageneraltv.com
Aún nos queda, pero algo es algo.
Besos veraniegos.
Rodearse de libros es rodearse de buenos amigos.
Lamia Yo también compré libros a peso, pero fué por curiosidad, el post está aquí: http://www.unjubilado.info/2006/11/10/libros/
Te propongo un trato, me prestas tus libros y pierdes a un amigo, elige, bueeeeeno si te pones así te los iré devolviendo.
rosa En los grandes establecimientos venden estanterías para libros, estrechitas pero esbeltas, en ellas caben muchos volúmenes y en todo caso cualquier carpintero te puede hacer alguna a la medida. Saludos
Apolonio De vacaciones y blogueando?. Te mereces un… montón de besos
juan luis ¡¡Qué pérdida de tiempo!!, yo te aconsejaría otro blog, el de unjubilado.info en ese si que se dicen chorraditas.
La zanahoria va de cine para la vista, pero cuidado, no abuses que hay mucho podenco por el mundo.
Ya he visitado a «La Generala» me ha gustado el diseño.
Y para terminar dos cosas, me gusta que me llamen de tu, me hace sentir mas joven, y los besitos los reservo para las féminas.
Así que un caluroso abrazo (dentro del coche mas de 55º)
bidul Yo la verdad es que no he comprado muchos libros, pero ahora que tengo un filólogo en casa, los amigos los tengo a espuertas y me voy llevando amigos al Pirineo.
Muchas Gracias y muchos Abrazos Emilio.
¡Que suerte tienes! con el coche a 55º ahorras un montón en gas butano.
A mi alguna clienta guapa de veintitantos años si me trata de usted me hunde en la miseria.
Me gusta leer y tengo muchos libros pero hace tiempo que me han desbordado por razón de espacios (pasillo, armarios, altillos, etc.). Ahora procuro que me los presten o los cojo en la bilbioteca, pero si me gusta muchisimo y deseo relerlo, me lo compro y busco un «nuevo sitio» que generalmente supone irlos atravesando encima de otros…El que no lee no sabe lo que se pierde.
Un abrazo.
Toupeiro Lo del ahorro energético no me lo había planteado, voy a ver si invento un cajón gordo, para guardar el calor del verano y soltarlo en invierno y al revés. Después de patentado y presentado a la prensa ya lo publicaré.
Un abrazo
Chela Yo ultimamente leo mucho, pero a veces me sale algún «tocho» y lo tengo que dejar. El otro día empezé «La de teléfonos» por Telefónica&Company y cuando iba a la mitad lo tuve que dejar solo me aparecian los autores con sus números de teléfono.
Un abrazo