Panes artesanales

La masa madre, el fermento natural y vivo que se utiliza en los panes hechos a la antigua usanza, es masa de la abuela, porque viene heredada de la anterior generación.

En la madrugada de los miércoles, algunas mujeres de Corcolilla (Valencia) acudían en el año 2000 a la panadería para hornear el pan que consumían sus familias durante la semana. En este documental nos muestran estas labores de amasado y horneado.

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21 respuestas a Panes artesanales

  1. Sara O. Durán dijo:

    Me gustó mucho el vídeo. Ya van siendo muy pocas las panaderías artesanales que quedan por acá. Me encantaba de chiquilla ir a comprar el pan y el olor de las panaderías. Hoy me gusta hacerlo.
    Un abrazo.

  2. Ester dijo:

    Con la pandemia se recuperó amasar pan en casa, mi hija lo sigue haciendo los fines de semana elabora diferentes variedades y se está convirtiendo en una panadera. Cada vez hay más tahonas que venden pan no congelado y huele a pan y al día siguiente está bueno. Muy chulo el video.
    Hasta el mes de agosto no subiré a las montañas y te puedo decir que es una necesidad física, se echan de menos y yo no puedo ir tanto como vas tú, disfruta y recarga pilas. Un abrazo

    • unjubilado dijo:

      -Ester- Con la pandemia nos tuvimos que acostumbrar a hacer muchas cosas de las que antes ni nos imaginábamos que seriamos capaces de hacerlas, entre ellas la fabricación del pan. Nosotros no fuimos capaces de hacerlo, así que comprábamos suficiente pan y lo congelábamos, para no tener que salir todos los días.
      En la montaña se está de maravilla, aunque hoy a las 8 horas teníamos en la calle nada más que 11 grados.
      Un abrazo

    • Magda dijo:

      Fue curioso el efecto colateral de la pandemia, mucha vida en casa y la levadura se agotaba en las tiendas pues panes y pizzas y bizcochos todo se hacía en casa ya que lo que sobraba era tiempo.

      Me alegra saber que alguien sigue haciendo lo que empezó entonces.

      • unjubilado dijo:

        -Magda- Durante la pandemia sobraba el tiempo, especialmente a las personas mayores y jubiladas y en algo había que entretenerse, yo me dediqué a hacer puzzles, a sembrar plantas en casa, a reparar pequeñas cosas que estuvieran medio estropeadas, a…
        Lo cierto es que hubo un antes y un después, aunque la vida empieza a parecerse a la época pre-pandemia, sin embargo aún quedan costumbres de la época de encierro.

  3. bisílaba dijo:

    Qué bonito vídeo. Me ha traído muchos recuerdos de niñez cuando iba con mi abuela al horno del pueblo a hacer dulces y que el panadero nos los horneara en el horno del pan.
    Y qué rico y qué bien olía…
    Abrazo de finde!

    • unjubilado dijo:

      -bisílaba- Creo que todas las personas que tenemos más de 20 años…
      Jubi, ¿20?
      Si, 20 multiplicado por algo.
      Decía que todas las personas algo mayores, recordamos en nuestra infancia el haber pasado por panaderías de las antiguas de leña y haber notado el olor a algo delicioso, cosa que no suele suceder en la actualidad.
      Un abrazo, esperando que ya estés totalmente curada.

  4. Yo también recuerdo haber ido de niña a un horno para ver hacer el pan y unas tortas muy buenas de las que me dieron una recién salida del horno.

    • unjubilado dijo:

      -Senior citizen- Eso lo hacía en el pueblo de mi padre, y nos daban un poco de masa para que hiciéramos un muchequito y mientras se terminaba de calentar bien el horno nos hacían nuestra figurita, que nos comíamos con deleite.

  5. emilio dijo:

    Aun recuerdo los panes que duraban una semana y lo que quedaba, si quedaba algo, se hacian migas, hoy la mayoría son panes de plástico congelado que solo hay que meter en el horno electrico del supermercado.
    Saludos

    • unjubilado dijo:

      -emilio- He ido de crio al horno con mi tía a hacer el pan, allí una vez a la semana se reunían unas cuantas amas de casa y se llevaba la masa de casa, harina molida en el domicilio, tamizada para separar el salvado y todo ello con masa madre, por supuesto te estoy hablando del pueblo de mi padre en el pirineo oscense.
      Hoy en día en la mayoría de los sitios te dan un pan que parece chicle.
      Saludos

  6. Magda dijo:

    Me contaron que la costumbre de untar el pan con tomate era de esos panes que duraban días pero una vez abierto la miga que quedaba expuesta se secaba, de ahí a humedecerlo con tomate y aceite y el punto de sal.

    El lunes vuelvo al trabajo después de unas vacaciones y dejo hecho bizcochos y galletas.

    Feliz sábado.

    • unjubilado dijo:

      -Magda- En el pirineo oscense había varias maneras de aprovechar el pan que se estaba secando, una era haciendo migas, otra sopas de ajo y si la última que yo recuerde era cortar una rebanada de pan y untarla con vino tinto y azúcar… espera que aún recuerdo otra, frotar un ajo seco en el pan, añadirles aceite y una pizca de sal.
      Por supuesto las he probado todas, aunque la del vino no me terminaba de gustar.
      Feliz sábado.

  7. Montse dijo:

    Ahora parece que renace el pan artesanal de masa madre, por Catalunya hay un resurgir de este tipo de panadería.
    Por cierto, Magda tiene razón, la costumbre del «Pa amb tomàquet» viene de reblandecer el pan duro para podérselo comer ¡nada, un aprovechamiento muy catalán, jaja!
    Muchos besos.

    • unjubilado dijo:

      -Montse- Con respecto a ablandar el pan seco, lee el comentario que le he hecho a Magda que es el mismo que podría hacerte a ti.
      Besos

      • Montse dijo:

        Ya ni me acordaba de estas propuestas de las migas, la sopa de ajo o el pan con vino, antes había muy buenas maneras de comer el pan duro.
        Besos.

        • unjubilado dijo:

          -Montse- A mi ambas cosas me gustan, tanto las migas como las sopas de ajo, aunque antes se hacían para no tirar el pan que se quedaba duro.
          Besos

  8. Es un gustazo visualizar las labores que dan lugar a unos panes cuyo sabor y consistencia no tiene nada que ver con los que se preparan industrialmente en cadena. En las panaderías tradicionales cada pan es único, de aroma atrayente y con una miga grata al paladar.

    • unjubilado dijo:

      -Una mirada…- Recuerdo que antes pasando por determinados sitios de Zaragoza olías perfectamente el obrador de panadería, y los jugos gástricos sin darte cuenta empezaban a trabajar, hoy en día es muy raro el sitio en el que puedes percibir estas sensaciones.

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