Cien años de la visita de Einstein a Zaragoza… y del misterio de su pizarra desaparecida
Dos años después de haber ganado el Premio Nobel de Física en 1921, el físico alemán Albert Einstein visitaba por primera vez España: el 22 de febrero de 1923 llegó a Barcelona para después ir a Madrid y Zaragoza, donde impartiría una serie de conferencias para compartir sus conocimientos.
Fue el 12 de marzo de 2023, justo hace 100 años, cuando el científico llegó a la capital aragonesa, donde impartió dos conferencias en en el Aula Magna del Paraninfo de la Universidad de Zaragoza tras aceptar la invitación de la Academia de Ciencias de Zaragoza.
Durante las 50 horas que Einstein estuvo en Zaragoza pronunció dos conferencias, fue invitado a una comida en el Casino Mercantil (actual Fundación Caja Rural de Aragón), visitó varios sitios de interés como la basílica del Pilar, la Lonja, la Aljafería y la Seo e, incluso, asistió a una pequeña fiesta en su honor en la casa del cónsul alemán, Gustavo Freudenthal.
Sin embargo, hay un hecho que en su momento llamó mucho la atención y que sigue siendo un misterio a día de hoy. Al término de una conferencia en la Facultad de Medicina y Ciencias de Zaragoza, el rector le pidió a Albert Einstein que no borrara la pizarra que había utilizado y ordenó que se guardara como recuerdo de la visita, pero desapareció.
La pizarra se perdió y desde entonces no se ha vuelto a saber nada de ella ni dónde se encuentra. En este sentido, el cineasta José Manuel Herráiz intenta dar con las claves de lo ocurrido con un documental publicado en Youtube, llamado ‘La pizarra de Einstein. ¿Misterio resuelto?’.
El vídeo es un poco largo, 12 minutos, pero sinceramente, creo que merece la pena verlo en su totalidad.
Crédito : 20 Minutos Zaragoza
No tenia ni idea. Ni sabía que el hombre había estado en Zaragoza. Me guardo el vídeo para verlo tranquilamente y, cuando lo visione, te cuento:
Totalmente de acuerdo con la teoría del documentalista. Leer el baboseo pelota que le dedica el rector Royo-Villanova en 1923 y las memeces que, trece años después, escribe contra el mismo científico, mentando a Dios para desprestigiar la Relatividad, en 1936, demuestran su catadura, así que el misterio de la pizarra está más que resuelto, tanto como la «oscuridad» científica en la que quedó España durante esas décadas aciagas.
Me ha encantado el documental, así que muchas gracias por traerlo.
-Una mirada…- Yo tampoco tenía ni idea, por ello y por ocurrir en Zaragoza, me he atrevido a publicarlo, me ha gustado el desarrollo, me ha encantado conocer algo de lo que era totalmente ajeno y he conseguido ampliar mis conocimientos.
Evidentemente la pizarra no existe, desgraciadamente fue destruida en los primeros años franquistas.
Por favor no me tienes que dar la gracias, las noticias, no las suelo ver en la tele, las veo en internet y en ocasiones me encuentro con «joyas» como esta.
Yo sabía que había estado en España; precisamente, hace una semanas leí un libro sobre la Residencia de Estudiantes en la que se mentaba la llegada a Madrid de Einstein. Pero de su estancia en Zaragoza no tenía idea.
Habrá que estar al tanto de los trabajos siguientes de José Manuel Herráiz.
-Una mirada…- Seguiremos ampliando conocimientos.
Quién habrá robado esa pizarra.
Un abrazo.
-Sara O. Durán- Alguno que querría tener un recuerdo de Einstein.
Un abrazo
Qué interesante el vídeo. No tenía ni idea de todo lo que cuenta. En cuanto al paradero de la pizarra… vaya usted a saber…
Un abrazo, amigo Jubi
-bisílaba- El paradero de la pizarra está claro, se volatilizó, o fue fusilada por el régimen.
Un abrazo
Seguro la usaron para iniciar la barbacoa en homenaje a tan honorable visitante…
Saludos,
J.
-José A. García- Las ciencias a la barbacoa.
Saludos
Yo pienso también que está claro lo que pasó con esa pizarra durante el franquismo: la destruirían por proceder de alguien que atentaba contra los fundamentos católicos del Glorioso Movimiento Nacional.
-Senior citizen- No hay que darle muchas vueltas al asunto, lo único que cabría preguntar es el fin que tuvo, si fue astillada, quemada, o simplemente la llevaron al paredón.
Hola, pues como paso con los nazis que destruyeron libros, obras de arte etc, pues con la pizarra iden de lo mismo, hoy en día pagarían millonadas por ella.
Besos.
-Piruja- Oye, y si falsificara una pizarra ¿tu crees que se darían cuenta?
Fórmulas con tiza, firma de Einstein, que aparece en muchos sitios, una mano de barniz por encima para que no se borre la tiza…
Besos
Prueba, quien sabe jeje
Besos.
-Piruja- Si lo hago y cuela, te invitaré a una comida por todo lo alto.
Besos
El documental es muy interesante y muy ilustrativo del final que seguramente tuvo la pizarra de Einstein. Curioso el cambio de actitud del rector, de hacerle la pelota más descarada a cuestionar sus teorías como fracasadas. Suerte tienen en Oxford que conservan la pizarra de cuando Einstein estuvo allí. Espléndida historia la que nos has traído. Un abrazo.
-Sabius- Me encontré la noticia por casualidad y sin tener muy claro si era cierta o simplemente una broma, fui buscando más información y hay varios periódicos que se hicieron eco recordando la conmemoración de los cien años.
Así que no dudé ni un instante y por lo que he podido apreciar a todos nos ha resultado cuando menos muy curioso.
Un abrazo
¡Vaya usted a saber dónde para esa pizarra!
Muchos besos.
-Montse- Esa pizarra hace tiempo que no existe.
La quema de libros es la práctica, generalmente promovida por autoridades políticas o religiosas, de destruir libros u otro material escrito; está vinculada al fanatismo ideológico y suele acompañar muchos conflictos bélicos. La práctica generalmente es pública y está motivada por objeciones morales, políticas o religiosas al material publicado.
En este caso no es un libro pero es un documento gráfico en una pizarra, así que imagina donde está.
Besos