Seguro que todos hemos utilizado el cajero en mas de una ocasión, pero seguramente muy pocos conocen quien inventó esta máquina que nos saca de tantos apuros.
Luther George Simjian era un armenio nacido en Turquía que emigró a los Estados Unidos. Fue el que inventó el primer cajero automático. En 1939 nuestro inventor registró 20 patentes de un prototipo de cajero automático. Para entonces vivía en Nueva York, por lo que convenció al Citicorp para que probaran su invento. Desafortunadamente resultó ser un adelantado a su tiempo. Sólo era usado por aquellas personas que no querían que les vieran los empleados del banco y utilizaban el recinto del cajero para dormir, así que el banco decidió cerrarlo.
Hace cincuenta años, si una persona necesitaba dinero en efectivo tenía que ir al banco. Y para eso, debía ir a la sucursal más cercana en horario de oficina. Ni un minuto más tarde. De lo contrario se quedaba con los bolsillos vacíos.
El primer cajero que llegó a funcionar fue inventado por John Shepherd-Barron que era un escocés que trabajaba para De La Rue, una empresa que por entonces fabricaba máquinas de contar dinero. Su trabajo estaba en Londres pero vivía en el campo. Solía ir los sábados al banco (que abría de 9 a 12:30) para sacar el dinero de la semana.
Una vez en 1965 llegó tarde por un minuto y empezó a preguntarse como obtener dinero sin necesidad de ser atendido por una persona. La idea le vino de una máquina expendedora de chocolate y pensó que podría hacer algo similar.
Su primer cajero automático fue instalado en una sucursal del banco Barclays en Londres en 1967. Dado que en aquella época no había tarjetas con banda magnética se utilizaban unos cheques con material radiactivo para el cajero. El cliente introducía el cheque, marcaba un pin de cuatro números y el dispositivo le proporcionaba diez libras esterlinas.
El código de cuatro números se ha convertido universal, pero no se debe a ningún motivo técnico. El señor Shepherd-Barron pensó que era capaz de recordar seis números de su número de soldado, pero al consultarlo con su mujer ella le respondió que solamente era capaz de recordar cuatro. Así es cómo nació el PIN (Personal Identification Number) o clave personal de 4 dígitos, que se ha convertido en un estándar mundial.
En España, el cajero automático no apareció hasta 1974, es decir, ¡7 años más tarde!, en la sucursal del Banco Popular de Toledo. Y ese mismo año aparecieron también los cajeros automáticos empotrados en la pared.
Fuentes consultadas : Yahoo finanzas, BBVA, Euronet.
Por lo que se dice, los cajeros automáticos están llamados a desaparecer conforme todos paguemos con tarjeta y no usemos el dinero en metálico. De hecho, la mayoría de las personas los usan solo para hacer gestiones que ya no se pueden hacer en ventanilla.
-Senior citizen- Aún tardarán, ya que si quieres sacar dinero en efectivo, en las oficinas solamente lo dan a determinadas horas. De hecho con el banco que yo trabajo, no hace mucho pese a que han eliminado muchas oficinas y cajeros que había en las puertas, los han cambiado casi todos y los han puesto mucho más modernos, pudiendo sacar el dinero con los billetes que se deseen, así por ejemplo si sacas 100 euros, puedes hacerlo con dos billetes de 50, o con uno de 50, dos de veinte y uno de 10…
La tarjeta puedes introducirla en la ranura o simplemente acercarla para que la detecte por contacto, y muchas más funciones que yo no he probado.
Recibimos con alborozo la instalación de cajeros automáticos, ello nos evitaba hacer colas ante el empleado de caja de nuestra entidad financiera, y la operación se realizaba personal y cómodamente en muy breve espacio de tiempo. Lo malo es que los bancos aprovecharon la extensa programación de prestaciones que daba el invento, para que el cliente poco menos que aplicara otras fases operativas para las que se precisa cierta preparación. Y eso no.
-Frajayo- Cada vez nos lo ponen más difícil a los mayores, sacar dinero aún lo se hacer casi siempre, digo esto ya que cuando no tengo no me da ni un duro.
Pero para otras cosas soy un negado.
Muy interesante, aunque poco van a durar. El futuro está en el pago con el móvil o con criptomonedas directamente.
Muchos besos.
-Montse- Lo de pagar con el móvil es posible, aunque para los mayores es un problema, lo del pago con criptomonedas lo veo más difícil ya que su valor está cayendo en picado.
Besos
Un gran invento. Un beso
-Susana- Es un gran invento, sin lugar a dudas.
Un beso
Fue un invento afortunado, aunque en los últimos tiempos algunos adolecen de falta de mantenimiento, tanto técnico como de higiene básica.
-Una mirada…- Por los sitios habituales por los que me muevo en Zaragoza, los cajeros están muy limpios y cuidados. En Broto también.
Puede ser que sí desaparezca pronto, Jubi. Cada día usamos menos el dinero en efectivo.
Un abrazo.
-Sara O. Durán- Evidentemente desaparecerán pero soy de la opinión que aún tardarán en hacerlo.
Un abrazo
¡Qué historia más interesante!
Y qué útil son los cajeros automáticos. Hoy en día nos solucionan muchos problemas porque se pueden hacer casi toda clase de gestión en ello y nos facilitan la vida si necesitamos efectivo porque están los 7 días, las 24 horas.
Me gustó conocer esta historia, Jubi.
Gracias.
Un abrazo.
-Contadora de Libros- La verdad es que fue un gran invento, aún recuerdo cuando había que acercarse al banco para sacar dinero, aunque al principio ni siquiera la nómina te la ingresaban, te la daban en efectivo y luego tu te encargabas de hacerlo, si ahorrabas algo.
Un abrazo
Hola, no conocía la historia de los cajeros y la verdad que es interesante, cada día se pueden hacer mas tramites con ellos aunque yo soy una nega para ello, solo los gasto para sacar dinero.
Besos.
-Piruja- Es muy interesante, pero me pasa lo que a ti, que solamente lo utilizo para sacar dinero, aunque en la actualidad estoy pagando casi siempre con tarjeta.
Besos
¿Cuántas personas murieron por exposición a la radiación de esos cheques? ¿Se sabe?
Gracias por la historia.
Saludos,
J.
-José A. García- Los de aquella época murieron todos, pero no por la radiactividad, lo hicieron de vejez.
Hace tres días a mi me hicieron una prueba » tomografía por emisión de positrones» (PET) que utiliza pequeñas cantidades de materiales radioactivos denominados radiosondas o radiofármacos y me lo inyectaron en vena y de momento no me he muerto, claro que antes o después también lo haré.
Saludos