Comiendo con brujas
Fotos propias. Nada más entrar en el restaurante me encuentro con una bruja que me mira de reojo.
Esta se tapa con la escoba, ya que no quiere que se la fotografíe.
En un descuido le hago una foto para que quede constancia.
Por las paredes observo una salamandra o salamanquesa que también le gusta el restaurante.
Vista parcial del restaurante, las ventanas abiertas, los ventiladores funcionando, ambiente agradable…
Las mas revoltosas, las tienen confinadas.
Por fin las brujitas nos trajeron el primer plato.
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Qué cucada de colección, yo tengo aquella que es un barómetro: si la escoba está seca señal de buen tiempo, si está mojada lluvia, si tiembla viento…
Y el segundo plato qué tal?
-Magda- Yo conozco el hombre del tiempo (Higrómetro fraile del tiempo), que es exactamente como tu comentas.
El segundo plato era a base de postres y algún que otro chupito, pero se me olvidó fotografiarlo.
Saludos
Así que pendoneando en Sarvisé… Ese plato del medio, ¿son migas con huevo frito encima…?
-Una mirada…- Son migas, en realidad fui yo el que pidió ese plato para compartir, claro que los huevos fritos, eran dos, yo los dejé.
Las migas me encantan, pero sin añadidos, por supuesto desaparecieron las migas y los huevos.
Suelo comer migas con unos granos de uva por encima, sin más añadidos.
-Una mirada…- Los granos de uva blanca no me molestan.
Compruebo una vez más que por esos nortes no tenéis nada de veganos… Aquí, como mucho, pediríamos una fuente de esas para dos personas.
… Y si soy yo, me tomaría un huevo frito y unas pocas migas. Aunque les faltan pimientos y algún «tropezón».
-Senior citizen- Prefiero las migas sin tropezones, era como siempre las había preparado mi madre y siempre las he comido en restaurantes. Ahora me las prepara mi mujer pero las deja un poco resecas.
-Senior citizen- Hay muchas maneras de cocinar y preparar unas migas, a mi me gustan solas sin ningún tipo de tropezones.
En este caso las migas eran para compartir.
No soy muy carnívoro pero he de reconocer que las carnes de estos nortes son exquisitas gracias a los pastos derivados de la climatología.
-Una mirada…- La carne es muy buena, pero yo cada vez admito menos cantidad.
Hola, me encantan las brujillas y la salamandra, que bonito es el restaurante, y la mesa puesta pues no te digo na:)
Besos.
-Piruja- Lo mejor de todo, es que no tienes que cocinar y tampoco tienes que fregar, esto último me toca a mi, y si la comida y el ambiente es bueno mucho mejor.
Besos
Pues parece que la comida no era sapos y culebras, sopa de ojos de lagarto, y huevos con arañas… porque se ve todo delicioso. Un abrazuco sin escoba
-ester- Las brujas eran para ahuyentar a las personas no conocedoras de nuestras costumbres, la comida fue deliciosa.
Un abrazo, la escoba la dejo para los no iniciados y conocedores de nuestras costumbres.
¿Pero chico, donde está ese restaurante? Que como la comida sea del talante que abriga el comedor con ese ornato, es como para salir corriendo…
Un abrazo
-Frajayo- El restaurante se encuentra en Sarvisé (Huesca). Es la cafetería, restaurante, asador Méliz. Como estaba todo tan exquisito si hay que correr será para coger mesa, ya que no las reservan, y si hay fila te toman el número de teléfono para avisarte cuando queda una mesa libre con la cantidad de comensales que has solicitado, mientras tanto te das un garbeo por el pueblo.
Un abrazo
Hola Emilio, es un lugar con tanto encanto como curiosidades, las brujitas le da un toque simpático, especialmente, las «confinadas», jaaaaaa. Los platos tienen buena pinta, total que os lo habéis pasado chipén, me alegro. Me dan ganas de ir.
Es estupendo que compartas con nosotros estos sitios para darlo a conocer, con la pandemia lo han pasado fatal…
Un abrazo.
-Mari Carmen Frnaconetti- Ahora dentro de las limitaciones existentes, se están recuperando un poco. Si vienes te enseñaré alguno de los sitios emblemáticos.
Un abrazo
Curioso restaurante con esa divertida decoración. Simpáticas las brujas . Las migas extremeñas con huevos y chorizo riquísimas.
Buen jueves Emilio
Un abrazo.
-Laura.M- Las migas con huevo, no me terminan de gustar por ello prefiero que el huevo se lo coma otro.
Un abrazo
Yo tampoco las he tomado nunca con huevo, pero no deben estar mal. Mejor con pimientos fritos o con sardinas asadas, pero a falta de eso…
-Senior citizen- Creo que tenemos costumbres distintas, eso de las sardinas no lo había oído nunca.
Muy divertido y peculiar lugar,
para curiosear bastante 🙂
Un fuerte abrazo
-Sara O. Durán- Exacto, es muy curioso, por ello lo traje al blog.
Un abrazo