El reportero Mike Seidel estaba retrasmitiendo en directo para Weather Channel desde Wilmington, Estados Unidos, el paso del huracán Florence.
Encapuchado con un chubasquero, el periodista mostraba dificultades para mantenerse en pie. Mientras relataba que el viento alcanzaba los cien kilómetros por hora, entraron en plano por detrás dos individuos en pantalón corto caminando tan campantes.
Weather Channel ha salido a explicar que los titubeos de Seidel se debían a que estaba sobre césped húmedo mientras los paseantes caminaban sobre el asfalto.
No está claro si el meteorólogo es más liviano que una hoja de papel o está fingiendo la severidad del viento para obtener secuencias de tormenta convincentes. De todos modos, este tipo probablemente necesite no hacer tanto la pelota a sus jefes.
Veamos el vídeo, por supuesto con la brisa, no he entendido nada de lo que dice.
Créditos : Menéame
Pues sí, a mí me parece que tiene mucho cuento… o el mal de San Vito, ja, ja…
Abrazos
Ligia Lo del baile San Vito, también es factible.
Abrazos
A veces nos quieren transmitir lo peligroso de su trabajo, a veces lo es pero tampoco es para estar presumiendo de que son unos héroes. Abrazos
Ester Estoy de acuerdo contigo, en la mayoría de ocasiones el trabajo del reportero puede llegar a ser peligroso, sin embargo otras veces, como pasa en esta, da la impresión de que está fingiendo y si no que se lo digan a los paseantes que aparecen en plano, que andan tan panchos.
Abrazos
jajajaja Menudo cara dura el tío…jajaja
Salud
Genín Esa también es mi impresión, quizás no sea así, aunque parece que sobre valoraba lo que estaba contando, al menos en esos momentos.
Saludos
A la corresponsal de TVE (que no me acuerdo como se llama) sí se le notaba ayer que intentaba quedarse quieta, pero se movía un poco. No era tan exagerada como ese y resultaba más convincente.
Senior citizen No he conseguido encontrar a la corresponsal de TVE, que me imagino que estaría hablando sobre los terremotos de Granada, por lo que no puedo opinar.
Este tipo no hace sino seguir el Manual del Perfecto Informador: «Exagérese hasta el delirio cualquier noticia y, si es necesario, invéntesela«. Esa máxima la cumplen a rajatabla los medios de comunicación, grandes, pequeño y a medio gas.
Una mirada… Está claro que si no hubieran aparecido los dos paseantes detrás de el hubiera colado perfectamente y con ello no quiero decir que el huracán o la tormenta tropical no sea importante, pero no en ese sitio, en ese momento.