La imagen a tamaño mas grande se puede ver aquí.
– Jubi, con estos artistas, sonarán las pistolas, ya que tienen que cuidar a la Condesa Marie Duvarre, pero en realidad se dan cuenta que lo que verdaderamente custodian, es un cargamento de oro para el emperador Mexicano Maximiliano.
¡¡Huy que fallo!! Pero como son de la misma época… y es que cuando me meto en El Desván de Rafael Castillejo, me pierdo recordando mi juventud.
Lo que yo quería deciros es que:
La orquesta está formada por: Federico Artigas (piano-teclados); Antonio Albarca (trompeta); José Carlos Calvo (saxos); José Antonio Giménez (bajo) y Javier Carasusán (batería).
Los cantantes son: Charo Fernández y José Maside.
Se trata de un emotivo recuerdo a los grandes letristas y compositores de aquellas tres décadas que coincidieron además con los mejores intérpretes de canción española que ha tenido este país.
Entrada libre hasta completar aforo.
Podéis ver un vídeo de Charo Fernández – «Y sin embargo, te quiero».
– Jubi ¿qué hacemos con la foto?
Lo de siempre, preguntar el nombre de los artistas y la película que estaban rodando.
En esta ocasión se puede visitar esta web, y podréis comprobar si habéis acertado.
Jubi, pasa por mi blog.
Gracias, Emilio. Y ya que estamos mezclando recuerdos… ¿qué te parece lo guapa que aparece Sarita Montiel en esa foto?
Hola Jubi… que bonita se veía Sara Montiel .. como cambiamos todos.. un abrazo
Javier Gracias. Lo tengo preparado y posiblemente lo publique hoy.
Rafael Castillejo Mezcla de recuerdos o contrarrestando el sonido de las armas al cantar de las coplas?
Hasta que el pueblo las canta,
las coplas, coplas no son,
y cuando las canta el pueblo
ya nadie sabe el autor.
Tal es la gloria, Guillén,
de los que escriben cantares:
oír decir a la gente
que no los ha escrito nadie.
Procura tú que tus coplas
vayan al pueblo a parar,
aunque dejen de ser tuyas
para ser de los demás.
Que, al fundir el corazón
en el alma popular,
lo que se pierde de nombre
se gana de eternidad.
De Manuel Machado.
Sarita está guapísima.
Balo Desgraciadamente hay cambios que se notan en nuestros rasgos, pero otros mas profundos son mas difíciles de ver.
Un abrazo