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En España todos sabemos que el teléfono de emergencias es el 1-1-2 pero no es igual al de otros países, así en Estados Unidos de Norteamérica es el 9-1-1.
En todos ellos suelen ocurrir llamadas realmente dramáticas. Veamos un ejemplo :
– 911, ¿cuál es su emergencia?
– 123 de la calle Main.
– Ok, ¿qué está pasando?
– Me gustaría pedir una pizza.
– Señora, está llamando al 911.
– Sí, lo sé. ¿Me pueden traer una pizza grande, la mitad con pepperoni y la otra mitad con champiñones y pimientos?
– Ummm…. perdone, sabe que ha llamado al 911, ¿verdad?
– Sí, ¿me puede decir cuánto tiempo tardará?
– Ok, señora, ¿está todo bien en su casa? ¿Tiene una emergencia?
– Sí, así es.
– Y… ¿no puede hablar porque hay alguien en la sala con usted?
– Sí, correcto. ¿Sabe cuánto tiempo tardará?
– Hay un agente a un kilómetro y medio de donde está usted. ¿Hay armas en la casa?
– No.
– ¿Se puede quedar en la línea conmigo?
– No. Hasta pronto, gracias.
Ese diálogo entre una mujer en peligro y la operadora de la línea de emergencia de los Estados Unidos trascendió hace pocos días y se viralizó por las redes sociales. En ella se demostró la imaginación de la víctima y la astucia de la agente que atendió el llamado y se dio cuenta de que algo raro pasaba. La Policía actuó de inmediato y detuvo al novio de la mujer, quien estaba drogado y le había dado una golpiza a la joven, que debió llamar al 911, engañar al violento y salvar así su vida.
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Pero no todos los casos terminan bien. El medio inglés también relata la historia de Tony, cuya madre fue operadora del 911 durante 30 años. «Un día un hombre llamó y con voz tranquila le dijo a mi mamá que estaba en un hotel, que se había rociado con gasolina y se iba a matar. Pero llamaba para que evacuaran el lugar porque no quería que nadie más resultara herido», comenzó su relato.
Y prosiguió: «Al tiempo que intentaba disuadirlo, por la otra línea mi madre llamó al hotel para informarles de lo que ocurría. Mientras los servicios de emergencia se dirigían al hotel, mi madre se mantuvo en la línea tanto con el hombre suicida como con la gente del local».
«En cuanto el hombre oyó las sirenas de las ambulancias, le preguntó a mi mamá si ya habían evacuado a todo el mundo. Ella intentó retrasar su respuesta pensando que se prendería fuego en cuanto le dijera que sí, pero la estrategia no funcionó. Segundos después, comenzó a oír los peores gritos de su vida y el teléfono quedó estático. Después, el silencio. El hombre murió en el hotel y mi mamá tuvo que oírlo. Un día terrible», concluyó.
Fuente: http://www.infobae.com
La primera parte me ha resultado esperanzadora, la gente es mas lista de lo que parece. Si no te importa es posible que la utilice para publicar sobre el maltrato en un blog diferente al mio. Abrazos
Ester En ocasiones se nos disparan las neuronas para ser posiblemente más ingeniosos de lo que somos en la actualidad.
Te he dicho en más de un ocasión que puedes copiar sin problemas cualquier cosa que publique en este blog, no obstante gracias por preguntarlo.
Un abrazo.
En la primera historia, la verdad es que las dos partes fueron muy inteligentes, supieron hablar y escuchar entre lineas. Al principio parece broma. Besicos.
trimbolera Por una parte nos encontramos con la perspicacia de la mujer que llama y por el otro lado con la astucia de la operadora, conseguida según parece por el tiempo que llevara trabajando en el teléfono de emergencias.
Besos
Pero hay que tener sangre fría, si yo fuera una señora a la que le están maltratando, convencer al bestia que vamos a pedir una pizza seria «harto» difícil., aquí en España suena un poco raro. (¡ Aguanta Pepe que voy a pedir una pizza con peperone, y luego sigues¡).
Jesus Me temo que según están las cosas en España, -ojalá me equivoque-, lo único que hubiera conseguido y eso con una operadora algo amable es el número de teléfono de cualquier pizzería cercana a su domicilio.
Acabo de recordar una anécdota que me surgió en el trabajo : Estando de guardia recibo un teletipo tecleado con dificultad, letra a letra, pidiendo socorro desde un departamento de Telefónica, le pregunto por teletipo que le pasaba y no recibo contestación. A punto de llamar a la policía, se me ocurre antes llamar por teléfono -era festivo- e inmediatamente me contesta un compañero que había ido a efectuar una llamada nacional, -entonces pagábamos todas las llamadas desde nuestra casa- y me dice que está con uno de sus hijos, que estaba jugueteando con la «máquina de escribir», enfadado le digo que mire lo que ha escrito y lo que yo le he contestado. (Totalmente real)
Todos los dias pasan cosas poco comunes, y las neuronas de las personas se lo curran
El cerebro estan sabio como desconocido, y es increible como busca caminos diferentes
UN ABRAZO
mjesus En ocasiones aparecen en nuestras mentes vestigios que no conocíamos y que hacen que salgamos de un apuro en un momento determinado, como es este el caso, creo que todos en la mayoría de las ocasiones sin darnos cuenta poseemos en mayor o menor medida parte de estas aptitudes.
Un abrazo.
Uno se queda dudando si publicar estas cosas es bueno o no, por un lado está bien hacerlo porque es una forma de dar ideas y puede ayudar a gente en peligro, por el otro también alerta a los malos, así que no se que seria mejor… 🙁
Salud
Genín Tienes toda la razón, yo en ocasiones con cosas bastante mas delicadas que esta, me echo las manos a la cabeza pensando en lo que publican los medios de comunicación y en más de un caso pienso que dan ideas para que los maleantes roben o atraquen en determinados sitios y por supuesto la manera de hacerlo.
Saludos
Pienso como Jesús que si te acaban de dar una paliza y amenazan con seguir, es difícil conservar esa sangre fría.
Senior citizen Efectivamente será difícil mantener la sangre fría que aparece en el escrito y posiblemente entre 100 casos, muy pocos por no decir solamente uno puedan llegar a buen término y entendimiento entre los dos interlocutores. Además posiblemente se de la circunstancia de que al ser novios, ella conocería que la pizza era comida favorita de el, con lo que al estar drogado ni siquiera se imaginó que no llamaba a la pizzería.
Como verás todo son suposiciones.
Quizás en un afán de supervivencia la imaginación se multiplique.
Calandra Seguramente, pero mejor que no nos toque sacar esa imaginación que tenemos escondida.
Leí la noticia. Se unieron dos personas muy inteligentes, para saber resolver un grave problema.
Un beso.
Laura. M Efectivamente, no solamente fue el ingenio de la persona que llamaba, coincidió con una persona receptiva que la entendió a la primera.
Un beso