El buscador Google nos pone los nervios de punta mostrándonos con un doodle las células nerviosas de un cerebro humano en cuyo centro se encuentra Ramón y Cajal, para recordarnos el 160 aniversario de su nacimiento.
Santiago Ramón y Cajal (Petilla de Aragón, Navarra, 1 de mayo de 1852 – Madrid, 17 de octubre de 1934) fue un médico español, especializado en histología y anátomo-patología. Obtuvo el premio Nobel de Medicina en 1906 por descubrir los mecanismos que gobiernan la morfología y los procesos conectivos de las células nerviosas, una nueva y revolucionaria teoría que empezó a ser llamada la «doctrina de la neurona», basada en que el tejido cerebral está compuesto por células individuales. Se trata de la cabeza de la llamada «Generación del 80» o «Generación de Sabios».
Hijo de los aragoneses Justo Ramón Casasús y Antonia Cajal, procedentes ambos del pueblo de Larrés. Vivió su infancia entre continuos cambios de residencia por distintas poblaciones aragonesas, acompañando a su padre, que era médico-cirujano. A corta edad, Ramón y Cajal y su familia abandonaron Petilla de Aragón y se mudaron a la localidad de donde era natural su padre, Larrés (1854), de allí pasó por Luna (1855), Valpalmas (1856) y Ayerbe (1860)
Médico en la guerra de Cuba (1873-1876)
Su trabajo y su aportación a la neurociencia se verían reconocidos, finalmente, en 1906, con la concesión del Premio Nobel en Fisiología o Medicina, galardón que compartió con el médico italiano Camillo Golgi, cuyo método de tinción aplicó Cajal durante años.
Algo poco conocido en Santiago Ramón y Cajal, su afición a la fotografía.
La URL del vídeo es esta.
Impresionante la cantidad de fotos de cadáveres que hemos visto!
Siempre pienso eso cuando veo fotos antiguas, no lo puedo evitar.
Salud
Genín Curiosa manera de pensar de las fotos antiguas, y desde luego en este caso efectivamente es así.
Saludos
Algunas personas valen para todo, no sabía que también hiciera fotos.
Leodegundia A mi me ocurre lo que en muchas ocasiones, que he oído campanadas pero no se a ciencia cierta si son verdad o no, y ahora con Google veo que efectivamente la fotografía era otra de las cosas que le gustaban a Don Santiago.
Un tipo interesante, don Santiago. Si viviera hoy se liaría a microscopiazos con los/las cabecicas de cemento que, a fuerza de tijeretazos, están terminando con cualquier posibilidad de desarrollo científico. Y mira que ha habido y hay en España investigadores de tronío en todos los campos… Como Margarita Salas, una bioquímica ya añosa pero con un cerebro y un corazón imponentes.
Una mirada… Creo que se liaría la manta a la cabeza y como consecuencia de su espíritu rebelde se levantaría contra todos los que están recortando las labores de investigación. La asturiana con 74 años se mantiene de maravilla, siendo profesora, investigadora y miembro de varias academias a nivel internacional.